MONUMENTOS RELIGIOSOS DE SEVILLA
-Iglesia de la Santa Cruz.
Está ubicada en el Barrio de Santa Cruz en una calle muy estrechita, cerca de la Giralda y de la Casa de los Pinelo.
Es una iglesia barroca del siglo XVII y dispone de una espadaña decorada con una cruz artesanal de hierro forjado sobre la portada.
El edificio tiene una planta de cruz latina, una nave central y dos laterales finalizando con el coro a sus pies.
Es celebre porque de su interior procesióna la Hermandad de la Santa Cruz el Martes Santo cuya sede está ubicada en el templo.
La primitiva Iglesia de la Santa Cruz fue construida sobre una antigua Sinagoga que existía en la Plaza de Santa Cruz.
Este templo fue expropiado y derribado el 11 de julio de 1810 por los franceses cuyo rey José I El Plazuelas derribó múltiples monumentos religiosos de las ciudades para construir plazas trasladándose la Parroquia a la iglesia del Convento de Menores.
La actual Iglesia se erigió bajo la dirección de la Orden de Clérigos Regulares Menores (1655) en un solar del antiguo corral de comedias (llamado de D. Juan) situado en la calle de la Borceguinería (actual Mateos Gago).
El 2 de febrero de 1728 se bendijo el templo conventual bajo la advocación del Espíritu Santo.
En este Iglesia están enterrados los restos de Bartolomé Esteban Murillo que vivió en este barrio.
En su interior se puede contemplar una variedad de retablos barrocos de gran belleza estando presidido el altar mayor por un templete con la Virgen de la Paz en madera policromada.
Entre sus tesoros artísticos destacan el Cristo de la Misericordia, el altar de Santa Ana, obra de Pedro Roldan o el Retablo de la Inmaculada, San Miguel y San Rafael, obra de Bernardo Simón.
En la parte posterior de la Iglesia se haya en la calle Ximenez Enaso existe un precioso patio y la entrada posterior a la Iglesia.
-La Iglesia de San Pedro.
Esta situada en una calle céntrica del casco histórico y ocupa una manzana de la Plaza de San Pedro.
Es de estilo gótico y tiene dos portadas, una en la calle Ángela de la Cruz y la otra en la misma plaza, obra de Diego de Quesada del siglo XVIII que contiene la imagen de San Pedro en una hornacina, obra de Martin Cardíno.
La característica más importante es su torre porque después de La Giralda es la torre más alta de Sevilla.
En su cuerpo se conservan partes mudéjares, un campanario barroco con ocho capillas y está rematado en un chapitel decorado con azulejos.
Contiene numerosos tesoros artísticos en sus capillas: la Capilla Mayor con las esculturas de Felipe de Rivas y las pinturas representativas de la vida de San Pedro así como la Inmaculada Concepción, la de San José, la Sacramental con pinturas de Zurbarán y Lucas Valdés, la de las Animas, la del Sagrario con la talla de Nuestro Padre Jesús de la Salud, la del Pilar y la del Cristo de Burgos que se compara con la talla de la Catedral de Burgos.
En esta Iglesia procesionan las Hermandades del Cristo de Burgos y Nuestra Señora del Pilar.
Esta Iglesia se construyó sobre una mezquita y se encuentran ubicada en la que fue antigua judería de la ciudad.
En una entrada se accede a un jardincito donde se encuentra una escultura dedicada a Sor Ángela de la Cruz
La joya más importante del templo es la Capilla del Cristo de Burgos, con el crucificado más antiguo de los que procesionan en la Semana Santa sevillana que data de 1574.
En su interior se haya la pila bautismal donde fue cristianizado el pintor Diego de Velázquez el 6 de junio del 1599.
-Iglesia de San Esteban.
Es un templo situado en el Barrio de Santa de Santa Cruz y a escasos metros de la Casa de Pilatos y fue construida sobre los restos de una antigua mezquita.
La Iglesia es de estilo gótico con influencias mudéjares y fue reconstruida en el siglo XVIII a causa del terremoto de Lisboa por el que fue bastante afectada.
Quizás este edificio tenga las dos mejores portadas góticas mudéjares de Sevilla siendo la primera la que se encuentra en la calle Medinaceli, gótica donde dieciséis leones de estilo románico son los protagonistas y la segunda en la calle San Esteban donde la imagen de San Esteban convierte a esta puerta, la principal de entrada al templo.
En su interior se han encontrado dos pasadizos secretos que se comunicaban con la Casa Pilatos por donde accedían los Duques de Medinaceli a oír misa a cambio de 500 maravedís que se emplearon para la construcción del Retablo del Altar Mayor, obra de Luis de Figueroa.
El templo se compone de tres naves, presbiterio y coro a los pies. Es una iglesia donde existe una gran tradición mariana a juzgar por las representaciones a la Virgen: la Dolorosa, y la Natividad, la Virgen del Rocío, de los Desamparados, de la Antigua, Virgen Niña con Santa Ana, la Virgen de los Reyes, la Anunciación, la Inmaculada, y la Virgen de la Luz y la Virgen del Carmen.
Su patrimonio artístico tiene varios retablos realizados por Zurbarán y cuenta con una decoración exquisita con yeserías del siglo XVII de la Capilla del Sacramento, el artesonado mudéjar del siglo XV y las piezas de orfebrería como el cáliz renacentista y una un relicario con las reliquias de Santa Justa.
-Iglesia de San Ildefonso.
Es un edificio en dirección a la Casa Pilatos y se encuentra esta Iglesia con una imponente fachada neoclásica donde lo más evidente es la altura de sus torres campanario distribuidas en tres cuerpos, adornadas con jarrones y balaustres situados a ambos lados de la portada, precedida de una verja de hierro forjado y contiene en una hornacina la imagen del santo titular San Ildefonso.
El edificio consta de tres naves con crucero y presbiterio y sus características constructivas son que la capilla mayor se encuentra bajo un arco sostenido por columnas jónicas de mármol rojo sobre las que se encuentran las esculturas de San Ildefonso en el centro y San Pedro y San Pablo a los lados.
En el lugar del retablo existe un templete con columnas coronadas en su cúpula con el conjunto “Alegoría de la Fe”, obra de José Barredo en cuyo centro está la imagen de la Inmaculada.
En los laterales de la Iglesia existen otros retablos como la dolorosa Nuestra Señora de la Soledad en su Esperanza, el Retablo de las dos Trinidades, el de San Cayetano, la Sagrada Familia, Jesús Cautivo, la Virgen del Coral, Nuestra Señora de los Reyes etc.,
Esta Iglesia es la sede de dos Hermandades, la Sacramental y Nuestra Señora de los Reyes.
-Iglesia de Santa Marina.
Es uno de los templos más antiguos de Sevilla y representativo del gótico-mudéjar de la ciudad.
Fue construido en el siglo XIII cuando los almohades ocupaban Isbiliya y fue terminada en la reconquista de la ciudad.
Esta Iglesia es característica por su torre almenada que se parece a un alminar árabe siendo el símbolo más evidente del legado gótico-mudéjar de la ciudad y también por su decoración sobre las puertas del arco ojival donde están evidentes cabezas de león, humanas y otros animales mezclados con hojas de vid.
La Iglesia se encuentra en un estado de conservación inmejorable, fruto de varias restauraciones debidas a los sucesivos incendios y los efectos del terremoto de Lisboa que dañaron muchísimo a los edificios de Sevilla.
En su interior se puede de contemplar la cúpula de Nuestra Señora de la Aurora con sus maravillosas yeserías y la cúpula mozárabe.
En su portada hay una pequeña representación de un dragón tragándose a Santa Marina mientras que sale indemne del vientre de este.
-Iglesia de la Santa Cruz.
Está ubicada en el Barrio de Santa Cruz en una calle muy estrechita, cerca de la Giralda y de la Casa de los Pinelo.
Es una iglesia barroca del siglo XVII y dispone de una espadaña decorada con una cruz artesanal de hierro forjado sobre la portada.
El edificio tiene una planta de cruz latina, una nave central y dos laterales finalizando con el coro a sus pies.
Es celebre porque de su interior procesióna la Hermandad de la Santa Cruz el Martes Santo cuya sede está ubicada en el templo.
La primitiva Iglesia de la Santa Cruz fue construida sobre una antigua Sinagoga que existía en la Plaza de Santa Cruz.
Este templo fue expropiado y derribado el 11 de julio de 1810 por los franceses cuyo rey José I El Plazuelas derribó múltiples monumentos religiosos de las ciudades para construir plazas trasladándose la Parroquia a la iglesia del Convento de Menores.
La actual Iglesia se erigió bajo la dirección de la Orden de Clérigos Regulares Menores (1655) en un solar del antiguo corral de comedias (llamado de D. Juan) situado en la calle de la Borceguinería (actual Mateos Gago).
El 2 de febrero de 1728 se bendijo el templo conventual bajo la advocación del Espíritu Santo.
En este Iglesia están enterrados los restos de Bartolomé Esteban Murillo que vivió en este barrio.
En su interior se puede contemplar una variedad de retablos barrocos de gran belleza estando presidido el altar mayor por un templete con la Virgen de la Paz en madera policromada.
Entre sus tesoros artísticos destacan el Cristo de la Misericordia, el altar de Santa Ana, obra de Pedro Roldan o el Retablo de la Inmaculada, San Miguel y San Rafael, obra de Bernardo Simón.
En la parte posterior de la Iglesia se haya en la calle Ximenez Enaso existe un precioso patio y la entrada posterior a la Iglesia.
-La Iglesia de San Pedro.
Esta situada en una calle céntrica del casco histórico y ocupa una manzana de la Plaza de San Pedro.
Es de estilo gótico y tiene dos portadas, una en la calle Ángela de la Cruz y la otra en la misma plaza, obra de Diego de Quesada del siglo XVIII que contiene la imagen de San Pedro en una hornacina, obra de Martin Cardíno.
La característica más importante es su torre porque después de La Giralda es la torre más alta de Sevilla.
En su cuerpo se conservan partes mudéjares, un campanario barroco con ocho capillas y está rematado en un chapitel decorado con azulejos.
Contiene numerosos tesoros artísticos en sus capillas: la Capilla Mayor con las esculturas de Felipe de Rivas y las pinturas representativas de la vida de San Pedro así como la Inmaculada Concepción, la de San José, la Sacramental con pinturas de Zurbarán y Lucas Valdés, la de las Animas, la del Sagrario con la talla de Nuestro Padre Jesús de la Salud, la del Pilar y la del Cristo de Burgos que se compara con la talla de la Catedral de Burgos.
En esta Iglesia procesionan las Hermandades del Cristo de Burgos y Nuestra Señora del Pilar.
Esta Iglesia se construyó sobre una mezquita y se encuentran ubicada en la que fue antigua judería de la ciudad.
En una entrada se accede a un jardincito donde se encuentra una escultura dedicada a Sor Ángela de la Cruz
La joya más importante del templo es la Capilla del Cristo de Burgos, con el crucificado más antiguo de los que procesionan en la Semana Santa sevillana que data de 1574.
En su interior se haya la pila bautismal donde fue cristianizado el pintor Diego de Velázquez el 6 de junio del 1599.
-Iglesia de San Esteban.
Es un templo situado en el Barrio de Santa de Santa Cruz y a escasos metros de la Casa de Pilatos y fue construida sobre los restos de una antigua mezquita.
La Iglesia es de estilo gótico con influencias mudéjares y fue reconstruida en el siglo XVIII a causa del terremoto de Lisboa por el que fue bastante afectada.
Quizás este edificio tenga las dos mejores portadas góticas mudéjares de Sevilla siendo la primera la que se encuentra en la calle Medinaceli, gótica donde dieciséis leones de estilo románico son los protagonistas y la segunda en la calle San Esteban donde la imagen de San Esteban convierte a esta puerta, la principal de entrada al templo.
En su interior se han encontrado dos pasadizos secretos que se comunicaban con la Casa Pilatos por donde accedían los Duques de Medinaceli a oír misa a cambio de 500 maravedís que se emplearon para la construcción del Retablo del Altar Mayor, obra de Luis de Figueroa.
El templo se compone de tres naves, presbiterio y coro a los pies. Es una iglesia donde existe una gran tradición mariana a juzgar por las representaciones a la Virgen: la Dolorosa, y la Natividad, la Virgen del Rocío, de los Desamparados, de la Antigua, Virgen Niña con Santa Ana, la Virgen de los Reyes, la Anunciación, la Inmaculada, y la Virgen de la Luz y la Virgen del Carmen.
Su patrimonio artístico tiene varios retablos realizados por Zurbarán y cuenta con una decoración exquisita con yeserías del siglo XVII de la Capilla del Sacramento, el artesonado mudéjar del siglo XV y las piezas de orfebrería como el cáliz renacentista y una un relicario con las reliquias de Santa Justa.
-Iglesia de San Ildefonso.
Es un edificio en dirección a la Casa Pilatos y se encuentra esta Iglesia con una imponente fachada neoclásica donde lo más evidente es la altura de sus torres campanario distribuidas en tres cuerpos, adornadas con jarrones y balaustres situados a ambos lados de la portada, precedida de una verja de hierro forjado y contiene en una hornacina la imagen del santo titular San Ildefonso.
El edificio consta de tres naves con crucero y presbiterio y sus características constructivas son que la capilla mayor se encuentra bajo un arco sostenido por columnas jónicas de mármol rojo sobre las que se encuentran las esculturas de San Ildefonso en el centro y San Pedro y San Pablo a los lados.
En el lugar del retablo existe un templete con columnas coronadas en su cúpula con el conjunto “Alegoría de la Fe”, obra de José Barredo en cuyo centro está la imagen de la Inmaculada.
En los laterales de la Iglesia existen otros retablos como la dolorosa Nuestra Señora de la Soledad en su Esperanza, el Retablo de las dos Trinidades, el de San Cayetano, la Sagrada Familia, Jesús Cautivo, la Virgen del Coral, Nuestra Señora de los Reyes etc.,
Esta Iglesia es la sede de dos Hermandades, la Sacramental y Nuestra Señora de los Reyes.
-Iglesia de Santa Marina.
Es uno de los templos más antiguos de Sevilla y representativo del gótico-mudéjar de la ciudad.
Fue construido en el siglo XIII cuando los almohades ocupaban Isbiliya y fue terminada en la reconquista de la ciudad.
Esta Iglesia es característica por su torre almenada que se parece a un alminar árabe siendo el símbolo más evidente del legado gótico-mudéjar de la ciudad y también por su decoración sobre las puertas del arco ojival donde están evidentes cabezas de león, humanas y otros animales mezclados con hojas de vid.
La Iglesia se encuentra en un estado de conservación inmejorable, fruto de varias restauraciones debidas a los sucesivos incendios y los efectos del terremoto de Lisboa que dañaron muchísimo a los edificios de Sevilla.
En su interior se puede de contemplar la cúpula de Nuestra Señora de la Aurora con sus maravillosas yeserías y la cúpula mozárabe.
En su portada hay una pequeña representación de un dragón tragándose a Santa Marina mientras que sale indemne del vientre de este.