Egún parece, la villa de Olivares fue en la época romana un pequeño asentamiento romano, llamado Superbina y que posteriormente se llamó Soberbina, con el transcurso del tiempo y siempre dentro del período de ocupación romano, fue absorbido por otra fundación romana próxima denominada Heliche, (pueblo que existió hasta 1843). En el pueblo se han encontrado restos arqueológicos su acueducto, que se encuentra en el Cerro de las Cabezas y que su función era para llevar agua desde el desaparecido poblado de Tejada hasta Itálica.
Fue perdiendo habitantes desde el período de ocupación de los visigodos, hasta el punto de que en la época árabe había casi desaparecido. De esta período, sólo una pequeña alquería llamada Estercolines y una torre junto a la carretera Olivares - Gerena, que hoy día se conoce como el Torreón de San Antonio y que es del siglo XII.
La fundación de esta villa es del siglo XVI, gracias al emperador Carlos y, que concede a Don Pedro de Gúzman una Carta Puebla para la fundación de una villa que se llamaría Olivares, y que servirá de título al Condado.La villa alcanzaría su máximo esplendor con de. Gaspar de Guzmán, Conde - Duque de Olivares, noble en la corte de Felipe IV, y que fundaría la Iglesia colegial y su conversión posterior en una abadía en 1623.
Hasta el siglo XIX no obtendría su independencia municipal.
Fue perdiendo habitantes desde el período de ocupación de los visigodos, hasta el punto de que en la época árabe había casi desaparecido. De esta período, sólo una pequeña alquería llamada Estercolines y una torre junto a la carretera Olivares - Gerena, que hoy día se conoce como el Torreón de San Antonio y que es del siglo XII.
La fundación de esta villa es del siglo XVI, gracias al emperador Carlos y, que concede a Don Pedro de Gúzman una Carta Puebla para la fundación de una villa que se llamaría Olivares, y que servirá de título al Condado.La villa alcanzaría su máximo esplendor con de. Gaspar de Guzmán, Conde - Duque de Olivares, noble en la corte de Felipe IV, y que fundaría la Iglesia colegial y su conversión posterior en una abadía en 1623.
Hasta el siglo XIX no obtendría su independencia municipal.
