Vamos a ver; en Igualeja el deporte favorito de sus habitantes, como en tantos pueblos, ha sido CRITICAR al vecino, y si es político, mucho más.
Es una pena; porque esos odios y rencores hacen que la convivencia sea muy difícil. Imaginaos; en un lugar tan pequeño, es inevitable que tengas que cruzarte en alguna calle a uno de esos vecinos a los que has criticado, con el que no cruzas ni una palabra.
Las cuestiones políticas trascienden más allá de los despachos del ayuntamiento, y se convierten en cuestiones personales.
Igualeja es un rincón muy bello, es una pena que la noticia de este pueblo sean las agresiones de un grupo de personas que pierden la dignidad por una idea política, o por un interés económico, y todos son culpables de esa imagen; sean del partido que sea.
Deberíamos reflexionar todos sobre cómo queremos que sea nuestro pueblo, qué imagen queremos dar al resto de la provincia y a nuestros propios hijos.
Un abrazo a todos lo igualejeños de bien (que son muchos).
Es una pena; porque esos odios y rencores hacen que la convivencia sea muy difícil. Imaginaos; en un lugar tan pequeño, es inevitable que tengas que cruzarte en alguna calle a uno de esos vecinos a los que has criticado, con el que no cruzas ni una palabra.
Las cuestiones políticas trascienden más allá de los despachos del ayuntamiento, y se convierten en cuestiones personales.
Igualeja es un rincón muy bello, es una pena que la noticia de este pueblo sean las agresiones de un grupo de personas que pierden la dignidad por una idea política, o por un interés económico, y todos son culpables de esa imagen; sean del partido que sea.
Deberíamos reflexionar todos sobre cómo queremos que sea nuestro pueblo, qué imagen queremos dar al resto de la provincia y a nuestros propios hijos.
Un abrazo a todos lo igualejeños de bien (que son muchos).