Siempre pasa lo mismo. Se quiere poner remedio cuando ya no hay solución y la realidad es que no hay
cine este año.
Primero se da por hecho que el cine lo va a poner siempre el mismo empresario (la
tradición manda) y por ese motivo el responsable de turno lo único que hace es esperar a que llegue el
verano.
Llega el verano y resulta que el que pone el cine por tradición este año se sale del tiesto y pide.
El responsable dice que las condiciones son inaceptables y claro le echa la culpa al
... (ver texto completo)