Ha sido una de las mejores cosas que me ha podido decir nadie desde que estoy en Jimena. Que soy cura-cura. Intento ser fiel al Magisterio y a la Santa Tradición, amante de mi Madre la Iglesia. No soy un cura tradicionalista, pero tampoco un cura pseudoprogre. He entendido perfectamente lo que me ha querido decir, y si esa es la impresión que doy, bendito sea Dios y que sea siempre ad maiorem Dei gloriam. Gracias de corazón.