CÓMO MANTENERSE EMOCIONALMENTE CONECTADO A TU PAREJA
Tocar
Toca a tu cónyuge con amor por lo menos cinco veces al día. Darle besos, abrazos y cogerla de la mano son los puntos de contacto saludables. Trata de hacer cada contacto de manera significativa, dejando que tu pareja serpa que él o ella está en tus pensamientos todos los días.
Hablar
La media de conversaciones en los matrimonios es de sólo cinco minutos al día. No es de extrañar que los cónyuges no se sientan cercanos y queridos. Cuatro días a la semana, planea al menos 45 minutos en los que podáis estar juntos a solas y hacer algo que ambos disfrutéis. Estos no son momentos para hablar de los problemas, sino más bien para aumentar vuestro tiempo de diversión juntos.
Citarse
Una noche por semana, haga viento o marea, tu cónyuge y tú debéis salir solos a disfrutar de la compañía mutua. Podéis hacer cualquier cosa, ir a cualquier parte, y hablar de cualquier cosa, excepto de tres: dinero, los niños, y el trabajo (a menos de que sean cosas increíbles).
Tener una noche de luna de miel
Al menos una vez al mes, planea una noche fabulosa de romance y amor. Planea los detalles: una comida maravillosa, unos momentos de diversión fuera de casa, una película romántica, y cualquier cosa que sea romántica para vosotros. Convierte ésta en la noche de recarga que hará avanzar tu relación más allá de las palabras.
pués eso es lo que hay.
Tocar
Toca a tu cónyuge con amor por lo menos cinco veces al día. Darle besos, abrazos y cogerla de la mano son los puntos de contacto saludables. Trata de hacer cada contacto de manera significativa, dejando que tu pareja serpa que él o ella está en tus pensamientos todos los días.
Hablar
La media de conversaciones en los matrimonios es de sólo cinco minutos al día. No es de extrañar que los cónyuges no se sientan cercanos y queridos. Cuatro días a la semana, planea al menos 45 minutos en los que podáis estar juntos a solas y hacer algo que ambos disfrutéis. Estos no son momentos para hablar de los problemas, sino más bien para aumentar vuestro tiempo de diversión juntos.
Citarse
Una noche por semana, haga viento o marea, tu cónyuge y tú debéis salir solos a disfrutar de la compañía mutua. Podéis hacer cualquier cosa, ir a cualquier parte, y hablar de cualquier cosa, excepto de tres: dinero, los niños, y el trabajo (a menos de que sean cosas increíbles).
Tener una noche de luna de miel
Al menos una vez al mes, planea una noche fabulosa de romance y amor. Planea los detalles: una comida maravillosa, unos momentos de diversión fuera de casa, una película romántica, y cualquier cosa que sea romántica para vosotros. Convierte ésta en la noche de recarga que hará avanzar tu relación más allá de las palabras.
pués eso es lo que hay.