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JIMENA: Hola Ana, me encanta leer tus vivencias, sigue deleitandonos...

Tarde pero seguro.
Vosotros, ustedes, sabeis la sensación que tiene un torero cuando da seis pinchazos y tres descabellos en el primer toro y luego el segundo se lo devuelven al corral, ¡pues eso es una "mierda" con la que tengo yo en estos momentos!
Mariano llevas razón ¿a donde estaba?, sencillamente cenando, también soy humano.
Ana he llegado a mi casa y yo no siento ni la música, estoy conectado a Internet, ya no me han entrado ganas de poner la "analógica".

Pero si triste estaba yo, la entrevistada tenía mucha familia fuera, en Jaén en Mendavia, también estaba acongojada pues veiamos vuestros mensajes y nada podiamos hacer, lo único bueno ha sido que ha quedado grabada y aunque no haya habido la gracia que da el sentirse agusto, al menos algún día podremos repetirla.

Bueno, ¡qué se va a hacer!. Lo importante es que se trate de arreglar el problema, si es que tiene solución posible; yo no sé de eso absolutamente nada, pero ¿podrías decirnos cuál fué el problema en sí?. Mariano y yo estábamos echándole la culpa a las "señoritas herzianas". Lástima por la señora entrevistada y me imagino el mal rato que habrá pasado el Sr. Fernando y por supuesto tú. Supongo que si has cenado es porque gracias a Dios, a tí los inconvenientes no te quitan el apetito y eso es saludable.

Una cosa son los problemas psíquicos y otros los somáticos, no deben de mezclarse, es la única manera de no padecer depresiones ni ningún tipo de enfermedades mentales, puesto que las atraen las corporales y vives en la gloria.

Tremenda reflexión... ¡y eso que es ya de madrugada! En serio, tienes razón, ningún problema debe quitarnos el apetito

Es que yo solo pienso en la penumbra de la noche, el día me embota la mente, el día solo sirve para trabajar mientras que la noche sirve para soñar.

Y después de leer, incluso el último de todos, me retiro a mi aposento, ha llegado la hora de recoger mi cuerpo y darle suelta a mi alma para que sepa buscar las soluciones necesarias para reparar los rasguños emocionales del día de hoy.

¡De verdad que en este foro se aprende!

Hola Ana, me encanta leer tus vivencias, sigue deleitandonos con ellas.
Un saludo