Dos de los que diariamente miran este pequeño rincón con sus respectivas esposas el día de Santiago tuvieron la suerte de compartir juntos este atardecer.

Aquella tarde fue muy bonita, y fue el pago a una deudad de muchos años, esperomos que pronto pase lo mismo en la otra parte un saludo.
Esta tuve la suerte de hacerla con un gran amigo mio que ha transitado durante muchos años por ese lugar.