Otro de los monumentos destacados de Niebla es el castillo de los Guzmanes (siglo XV), obra cristiana sobre cimientos más antiguos donde en verano se dan teatro y conciertos. Las murallas almorávides, con sus tres kilómetros de perímetro, son las más importantes de España de la época. Tiene cinco puertas y 46 torreones (Puerta del Agua, Puerta del Embarcadero, Puerta del Buey, Puerta del Socorro, Puerta del del Agujero y Puerta de Sevilla). Fuera del recinto amurallado, merecen una visita el puente y el acueductoromanos. De esta época, precisamente, se conservan restos no fáciles de encontrar de construcciones como su calzada. Así como los de una basílica. A las afueras de la localidad sorprende por su belleza el puente Romano, situado sobre el río Tinto, es una de las estampas más características de Niebla. Cercanos a Niebla se encuentran los dólmenes de época prehistórica, como el de Soto, en la vecina Trigueros, y restos neolíticos en la zona de Los Bermejales. Resulta aconsejable una escapada que permita conocer los parajes.