El nombre de la ciudad de
Huelva procede del antiguo Onuba que aparece como Ὄνοβα en las
fuentes griegas y como Onuba u Onuba Aestuaria en las latinas. El término procede de alguna de las lenguas prerromanas de la península y su significado es desconocido, si bien se detecta en él la presencia de un sufijo -oba o -uba que también aparece en otros topónimos como Ossonoba, Corduba o Salduba. También está documentada la forma Olba según el arqueólogo alemán Adolf Schulten en su obra sobre Tartessos. Onuba, la actual ciudad de Huelva (
España), fue el nombre de un asentamiento fenicio y tartesio datado desde al menos el siglo X a. C. A partir de este término se desarrollaron los siguientes nombres que tomó la zona para los colonizadores
romanos, árabes o cristianos (Huelva). La Real Academia española lo escribe como Ónuba. Adolf Schulten fue un arqueólogo, historiador y filólogo alemán, célebre por su dedicación a España y sus investigaciones sobre Tartessos. El topónimo «Onuba» ha sido usado frecuentemente por diversas empresas e instituciones de la ciudad en el siglo XX y es la base del gentilicio oficial de las gentes de la ciudad y la provincia: onubenses. El adjetivo gentilicio es aquel que «denota relación con un lugar geográfico», ya sea por
barrio,
pueblo, ciudad, provincia, región, país, continente, o cualquier otro lugar o entidad política. El adjetivo gentilicio se puede sustantivar, es decir, se puede referir a una persona mencionándola únicamente por su gentilicio y así se puede decir correctamente el bruneano, la francesa, etc.