CARTAYA: 5-CARTAYA (CASHTM) HUELVA...

5-CARTAYA (CASHTM) HUELVA
Es un Iqlim de la Cora de Labla, ubicada en la Comarca de la Costa Occidental, situada a 4 km de las Playas El Rompido, San Miguel y el Nuevo Portil y la parte más occidental de El Portil y que se encuentra a 22 km de Huelva Capital.
La ciudad fue fundada por el Marqués de Gibraleón D. Pedro de Zúñiga en el estuario del río Piedra y su toponimia procede del vocablo fenicio “carteia” que significa ciudad aunque su poblamiento no es continuado pero es muy antiguo.
Durante la Edad Media en la época Andalusí apareció con el nombre de “qarqaya”, término fonéticamente parecido al actual.
La historia de Cartaya se puede dividir en diferentes etapas:

-Prehistoria.

Según las investigaciones realizadas hay testimonios de restos prehistóricos en esta zona, habiendo encontrado piezas de la industria lítica del Paleolítico Inferior como yacimientos achelenses con testimonio de cantos, bifaces y picos o del Paleolítico Medio con testimonios del tipo musteriense.
Habiendo investigado si existía alguna conexión entre las poblaciones de las orillas del río Piedras, del Odiel, o del Tinto no se han encontrado ninguna.
Los restos arqueológicos de la población en el actual núcleo urbano de Cartaya no se datan hasta la época fenicia.

-Romanización.

A pesar de la existencia en el núcleo de Cartaya y en su costa cercana de numerosos hallazgos de pecios no fueron habitados hasta la llegada de los pueblos mercaderes fenicios pero solamente hasta el siglo siguiente no se procede a un avance significativo.
Durante la romanización la ciudad de Cartaya estaba enclavada en las regiones conocidas como Beturia Celtica y Túrdula que pertenecían a la provincia senatorial romana de Baética.
Cartaya estaba situada dentro de la calzada romana que unía dos ciudades de Praesidio y Ad Rubras desarrollándose en esta zona la alfarería y especialmente las ánforas por la demanda de los asentamientos romanos de Punta Umbría u Oruba Aestuaria.
Se han encontrado numerosos vestigios de la presencia romana en la época del Bajo Imperio romano por su ubicación física de Cartaya en un importante nudo de comunicaciones entre el este y el oeste.

-Edad Media.

Tras la presencia musulmana en Hispania en el 711, sería Tarek quien ocupa la zona habiéndose encontrado vestigios de alquerías en esta zona correspondiente a la Alta Edad Media.
Cartayá se la conoció en la época andalusí como Cashtm y estaba integrada en la Cora de Labla que pertenecía a Gharb Al-Ándalus.
Durante el Califato de Córdoba permaneció unida a la Cora de Labla y tras su desintegración en 1012 se integró en la Taifa de Huelva hasta que esta también desapareció y sería conquistada en 1052 por Almutamid, rey de la Taifa de Sevilla.
La conquista cristiana se produjo en el siglo XIII por el rey Alfonso X El Sabio en el año 1262 tras la toma de Niebla y de Huelva alcanzó una gran importancia por ser el límite con Portugal, quedando como dique a la política expansionista de este país y se denominó Banda Gallega a esta parte de fronteras.
Sera en 1229 cuando se determinará los límites territoriales con Lepe a través de río Piedras.
También el Maestre Fernán García fue quien trazó los términos entre Gibraleón y Ayamonte poniendo los mojones entre estas localidades.

-Edad Moderna.

En los siglos XV y XVI Cartaya fue otorgada en Señorío de la Casa Zúñiga pero estaba enclavada en una zona muy insegura por los constantes ataques de los piratas berberiscos y la acción de los normandos.
Sería el Marqués de Gibraleón D. Pedro de Zúñiga y Manrique de Lara quien gana el pleito a Alfonso de Guzmán, Señor de Ayamonte y Lepe y desde entonces se estableció un paso en barco a través del río Piedras y fundó junto a este río la población para defender las agresiones y estableció la normalidad en esta zona.
También ordenó construir un castillo situado actualmente al oeste del casco urbano y del que se conserva el patio de armas.
La construcción de este baluarte defensivo que se utilizo como refugio ideal para la población fue el motivo para consolidar la repoblación.
Durante este tiempo se construyó la Iglesia, de estilo mudéjar, sobre la cual se levantó posteriormente la Parroquia de San Pedro.
Será su descendiente Álvaro de Zúñiga quien consolidó su poder familiar en la Baja Andalucía con el matrimonio de su primogénito con la hija de Juan Alfonso III de Guzmán, quien recibió como dote Ayamonte, Lepe y La Redondela.
Durante el siglo XVI el Puerto de la Ribera tenía un concurrido tráfico porque mantenía comercio con el Puerto de Sevilla disponiendo de una nave procedente del Puerto de Cartayá y de Flandes.
Las naves de Cartaya emprendían rutas marítimas hasta el Cabo Espartel y el Cabo Bojador con el transporte de vinos y trigo.
También tenían atarazanas para la construcción de carabelas en el siglo XV. No obstante, a pesar de la actividad marítima, Cartaya no tuvo la importancia que las poblaciones próximas como Palos de la Frontera o Moguer en la historia de la navegación.
Sus marineros estuvieron presentes en el primer viaje colombino y así nombres como Talafar, Vizcaíno y Alonso Rodríguez fueron testigos de esta expedición. También en la segunda expedición colombina en la carabela La Niña estuvo presente el marinero carteyero Rodrigo Talafar, en la carabela San Juan, Alonso Rodríguez y en la carabela Cardera, Juan Vizcaíno.
Durante aquellos tiempos se ubicó en Cartaya la Orden religiosa de la Merced Descalza dedicada a la redención de cautivos así como también se habían establecido en otras poblaciones cercanas.
En el siglo XVII, en el año 1602 se produce una epidemia de peste en la aldea de San Miguel de Arca del Buey donde se produjeran un decrecimiento de la población notable.
También el Terremoto de Lisboa del 1755 provocó apreciables daños en el lugar como en el Convento de la Merced Descalza.

-Edad Contemporánea.

Durante los años 1804 a 1808 Cartaya se íntegro en la provincia marítima de Sanlúcar de Barrameda y al reino de Sevilla.
Tras la Guerra de la Independencia en el siglo XIX, fue lugar de correrías del famoso guerrillero Francisco Abad Moreno “El Chaleco” quien dirigía sus partidas de patriotas y fue el azote de los invasores franceses por sus acciones bélicas en la comarca de La Mancha, Jaén y Córdoba. Otras partidas de guerrilleros fueron también muy activas en Córdoba, Sevilla y Huelva como las de Bustamante, Bartolo y Trigo.
Las Cortes de Cádiz suprimían los Señoríos jurisdiccionales mediante el Decreto del 6 de julio de 1811, pero una vez derrotados los franceses y expulsados de España, los avatares políticos (vuelta al absolutismo) hicieron frenar las reivindicaciones de los ayuntamientos de recuperar la plena jurisdicción sobre el territorio del municipio y sería en 1834, cuando tras la introducción del régimen liberal, definitivamente queda abolido el régimen señorial.
Sería Javier de Burgos quien en su reforma administrativa la integraría como ciudad dentro de la provincia de Huelva.
A lo largo del siglo XIX, durante la vigencia de los distintos gobiernos liberales se van a producir las “desamortizaciones” que es un proceso de expropiación o nacionalización de las propiedades de la Iglesia en concepto de venta de los llamadas “manos muertas”, nombre que recibieron las instituciones como la Iglesia y los Consejos que no podían vender sus tierras.