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ZAGRA: No me parece ni bien, ni mal, amigo EG, el que cada...

Aunque sea tarde, por lo del día del libro, quisiera recomendar dos libros: el primero, me pasa igual que a EG con "Platero y yo", lo tengo casi siempre a mano y son ya muchos años los que llevo releyédolo, y cada vez aprendo más con él sobre la trascendecia vital, y sobre lo commplejo el ser humano: "Las Obras completas de Antonio Machado" Y un segundo que leí en mi adolescencia y que me marcó profundamente: "Animal Farm" del escritor ingles George Orwell, ("Rebelión en la Granja" en su versión castellana). Un libro ameno y de fácil lectura, ideal para un fin de semana.
Quiero también terciar, pues desgraciadamente sigue siendo tema de plena actualidad, sobre el mal llamado, a mi juicio, caso Garzón. Y digo lo de "desgraciadamente", porque vengo asistiendo con vergüenza, al enmañaramiento y la politización mal intencionada, por parte de un amplio sector de una izquierda politica totalitaria, de algo que en cualquier sociedad democratica debe resultar normal: la aplicación de la ley por parte de los Tribunales de Justicia a todos los ciudadanos por igual; eso que tecnicamente denominan los juristas "El Imperio de la Ley". Hemos de convenir, y no es tema baladí, que aún no se ha condenado a Garzón. La presunción de inocencia juega, como para todo el mundo, a su favor. Lo que aquí se dilucida es si un Magistrado de la Audiencia Nacional, ha transgredido la Ley o no; para ello, en un procedimiento con todas las garantías, como a cualquier ciudadano, se le va a juzgar; porque no olvidemos que en tres causas, la sala 2ª del Tribunao Supremo, por unanimidad de sus cinco miembros, ha estimado que hay indicios de delito. Si tras el procedimiento resulta que es inocente, todos y Garzón màs que nadie, habremos ganado. Si resulta culpable, todos habremos ganado. Que cumpla su condena y a otra cosa. No hay que tener un mente preclara para comprender que nuestra democracia le debe mucho a Garzón. Pero de igual manera, nadie puede pretender que eso le exima de que, como todo el mundo, tenga la obligación de cumplir la Ley. Toda persona que delinque, es hasta ese momento un buen ciudadano; la bondad de esa ciudadanía no impide que en el momento en que, tras un proceso justo, si es condenado, cumpla su condena. Pues con Garzón, igual que con cualquier otro ciudadano. Todo lo demás, son ganas de enmarañar, de desviar la atención, y de pretender situarse por encima del resto de los mortales, adoptando la chequista y sectaria creencia de que si son los míos quienes lo hacen mal, están justificados. Eso amigos míos tiene un nombre: Totalitarismo. O dicho en cristián paladino: La ley del embudo.
Yo estoy a favor de que la Ley sea igual para todos; por lo tanto, y utilizando las expresiones de este foro, yo tampoco apoyo Garzón.

AVINARETA.-

Avinareta, estoy de acuerdo contigo. La justicia no debe ser la ley del embudo, sino, como reza su anagrama: una señora con los ojos vendados y con la balanza en la mano. Es decir, igual para todos, sin importar quién sea el que se enfrenta a ella. El incumplimiento de la ley no se justifica con nadie, por muchos servicios prestados al país y si hay que hacer una excepción a eso, sería, a mi juicio, la de un padre o madre de familia que es capaz de hacer algo, lo que sea, legal o ilegal para dar de comer a sus hijos. En su momento, yo escribí unas líneas de apoyo al juez Garzón, ese apoyo es de ánimo, como se puede animar a alguien ante una desgracia, pero nada más. A mi me gustaría, que saliera libre de toda sospecha porque considero que es un buen juez, pero si no es así, lo siento por él. La ley debe ser que quien la haga, la pague, sino estaríamos ante lo que Pedro Pacheco dijo en cierta ocasión: la ley es un cachondeo.
En cuanto a que haya bastante gente del mundo intelectual y del espectáculo, llamense de izquierdas, que están celebrando actos en favor del juez; tampoco hay que extrañarse, estamos en un país libre y es de derecho que cada cual apoye lo que considere. No olvides Avinareta, que en algunas oportunidades, otras gentes, llamadas de otra ideología, se han manifestado en contra de los jueces o de algún acto judicial, y tampoco ha pasado nada. En definitiva, si tenemos unos jueces honestos, y no hay por qué dudar de ello, harán su trabajo con toda su profesionalidad e independencia de que la ley les prevee.
Un saludo afectuoso. E. G.

No me parece ni bien, ni mal, amigo EG, el que cada cual apoye lo que quiera. Pero la cuestión no es esa. Ese grupo de ¿intelectuales? y gente del espectaculo, no están celebrando actos a favor de nadie. Estos están celebrando actos en contra de.... En este momento en contra del Magistrado Varela y del Tribunal Supremo en su conjunto, al que han acusado de dar cabida en sus filas a torturadores franquistas: Jiménez Villarejo dixit. ¡Imagínate! que a mi, por calificar una intervención tuya de "discurso trasnochado" se me tiraron a la yugular. ¿Tu crees que el estar en un pais libre, como dices, da derecho a eso? O sea, ¿que apoyándose en el sacrosanto derecho a la libertad de reunión y de expresión, personajes como este Jiménez Villarejo anden campeando por sus fueros lanzando exabruptos (por ser fino) de esa calaña, más propios del pistolerismo callejero que de un fiscal emerito? Porque no se si sabes, amigo mio, que este personajete, fue fiscal con Franco. Es decir, en sus años de ejercicio profesional, tuvo que perseguir en los tribunales franquistas a todos aquellos que iban en contra de los principios del movivimento nacional, a los que Jimenez Villarejo prestó juramento. Sin embargo, fijate, ahora nos ha salido antifranquista el tío. Que vueltas de la vida. Por no decirte nada del coro de ángeles caídos que le acompañaban: esos que tu llamas de izquierdas y del espectáculo. Entiendase la Bardem, el Almodovar y Willy Toledo, entre otras esquisiteces. Al final, siempre son los mismos. Lo de menos es el motívo, da igual, el Prestige, Garzón, la guerra de Irak o el 11 M, lo de más es montar la algarada. Menudas perlas..."de izquierdas". Ah, se me olvidaba, los mismos que habilmente arengados por algunos psoistas, asaltaron la sede de los populares en el día de reflexión previo a las elecciones del 14 de Marzo. Algo desconcocido en nuestra historia reciente, e incompresible para un autentico democrata; y decían esa noche, estos democratiticos de poca monta, que España no se merecía un Gobierno que mintiera. Que vergüenza, si hubiera quien la pasara.
Al final, mi buen amigo, la ideología, las actitudes, los comportamientos, e incluso los valores, son algo más que una cuestión de matiz. Y para ejemplo un botón: cuando pidieron la recusación de Garzón por la querella interpuesta contra Santiago Carrillo por el caso "Paracuellos", Don Baltasare la resolvió inmediatamente y por su puesto denegándola. Ahora que él pide la recusación de Varela, este la traslada a la Sala para que, asepticamente, sea quién resuelva. Si es que... hay maneras y maneras, hay personas y personajillos. Hay señores y botarates. Por cierto, la última, Don Baltasare deja en libertad a un etarra para que cuide a su madre; su madre que está paseando por la calle y con dos hijas más. Enternecedor. Y es que Don Baltasare es un hombre con sentimientos. Una pregunta, ¿es que el etarra que ha puesto en libertad es menos malo que los del Gürtel?

En fin, para terminar (por el momento) quisiera recomendaros otro libro de esos que como el Jueves Santo (perdón si hiero el corazoncito de los no creyentes) hay solo tres que brillan más que el sol. Me refiero a uno de los mas grandes libros de poemas de amor escritos por el hombre: "La voz a ti debida" de Pedro Salinas. Procurad leeroslo este fin de semana y a ver si llevo razón o no.

AVINARETA.-
Respuestas ya existentes para el anterior mensaje:
Amigo Avinareta, he leído con mucha atención, como siempre, tu intervención y sólo puedo decir que la respeto profundamente.
En cuanto a Pedro Salinas, tengo que confesarte que no he leído nada de él. La verdad, de la Generación del 27, he leído muy poco a excepción de Rafael Alberti. De él tengo varios libros y, casi todos, los he leido. Para mí, el problema que tiene la poesía, si se puede llamar problema, es que hay que leerla de a poquito, como si se estuviera uno bebiendo un licor sabroso, ... (ver texto completo)