Buenas noches Pepemg.
Como me gusta leer sus mensajes. Siempre tiene las palabras idóneas para con su gente y esa manera de explicar con detalle, cualquier cosa que le pregunten es digno de admirar.
A mi me pasa como usted me tira tanto el pueblo; eso que el mio es pequeñísimo y no hay nada pero me llena tanto esa paz, sin ruidos, el poder hablar con la gente y expresar tu cariño hacia ellos y reciprocamente.
Yo antes, iba dos o tres veces al año ahora por circunstancias de la vida, solo voy el mes de vacaciones y me saben (tan a poco) pero bueno esperaremos al jubilación.
Un saludo Mª. Angeles.
Como me gusta leer sus mensajes. Siempre tiene las palabras idóneas para con su gente y esa manera de explicar con detalle, cualquier cosa que le pregunten es digno de admirar.
A mi me pasa como usted me tira tanto el pueblo; eso que el mio es pequeñísimo y no hay nada pero me llena tanto esa paz, sin ruidos, el poder hablar con la gente y expresar tu cariño hacia ellos y reciprocamente.
Yo antes, iba dos o tres veces al año ahora por circunstancias de la vida, solo voy el mes de vacaciones y me saben (tan a poco) pero bueno esperaremos al jubilación.
Un saludo Mª. Angeles.
Buenas noches Mari Ángeles:
Gracias, Mari Ángeles, por tus palabras. ¡Ay, perdón! Acabo de tuterte cuando tú me tratas de Usted. Por favor, Mari Ángeles, aquí, en el Foro, todos nos tuteamos como si fuésemos hermanos. Y hermanos somos porque somos hijos del mismo pueblo. Laborcillas como Pedro Martínez son, por así decirlo, hijos mellizos del Mencal, y parientes o allegados de Sierra Harana y sus aledaños, por tanto quienes hemos nacido al abrigo de estos montes somos en cierto modo eso, hermanos, luego el usted retíralo, por favor.
No sé que tendrán nuestros pueblos, no lo sé, pero hasta el ladrido del perro tiene acento bello. Y te embelesas con el canto del gallo al amanecer, con el gorrioncillo que anida en las tapias del corral, con el repique de campanas o la tonadilla del pregonero o, en el campo, observando una hilera de hormigas, siguiendo con la vista la perdiz que emprende el vuelo o disparando con la cámara fotográfica al conejo que salta a tus pies. Todo, en nuestros pueblos, es hermoso, hasta el sonido escuchado nítidamente desde un kilómetro de distancia de dos o más personas al hablar embarga el ánimo.
Por Laborcillas paso cada año cuando me desplazo a Granada en la Alsina u otro medio. En mi adolescencia acompañé alguna vez a mi padre, que tenía por la época pescadería, a vender allí pescado. Más tarde, en mi juventud, el Ayuntamiento de Laborcillas me ofreció una plaza de administrativo, no la acepté, yo estaba empleado en el Ayuntamiento de Pm. Y de Laborcillas era mi buen amigo Pardo Titos ¿Te suena estos apellidos? Él, sindicalista de la UGT, tiene dedicada una calle en Laborcillas. Su esposa e hijo vivían en Sabadell...
Marí Ángeles un cordial saludo.
Gracias, Mari Ángeles, por tus palabras. ¡Ay, perdón! Acabo de tuterte cuando tú me tratas de Usted. Por favor, Mari Ángeles, aquí, en el Foro, todos nos tuteamos como si fuésemos hermanos. Y hermanos somos porque somos hijos del mismo pueblo. Laborcillas como Pedro Martínez son, por así decirlo, hijos mellizos del Mencal, y parientes o allegados de Sierra Harana y sus aledaños, por tanto quienes hemos nacido al abrigo de estos montes somos en cierto modo eso, hermanos, luego el usted retíralo, por favor.
No sé que tendrán nuestros pueblos, no lo sé, pero hasta el ladrido del perro tiene acento bello. Y te embelesas con el canto del gallo al amanecer, con el gorrioncillo que anida en las tapias del corral, con el repique de campanas o la tonadilla del pregonero o, en el campo, observando una hilera de hormigas, siguiendo con la vista la perdiz que emprende el vuelo o disparando con la cámara fotográfica al conejo que salta a tus pies. Todo, en nuestros pueblos, es hermoso, hasta el sonido escuchado nítidamente desde un kilómetro de distancia de dos o más personas al hablar embarga el ánimo.
Por Laborcillas paso cada año cuando me desplazo a Granada en la Alsina u otro medio. En mi adolescencia acompañé alguna vez a mi padre, que tenía por la época pescadería, a vender allí pescado. Más tarde, en mi juventud, el Ayuntamiento de Laborcillas me ofreció una plaza de administrativo, no la acepté, yo estaba empleado en el Ayuntamiento de Pm. Y de Laborcillas era mi buen amigo Pardo Titos ¿Te suena estos apellidos? Él, sindicalista de la UGT, tiene dedicada una calle en Laborcillas. Su esposa e hijo vivían en Sabadell...
Marí Ángeles un cordial saludo.
Buenas noches Pepemg.
Por norma, siempre que me dirijo a alguien por primera vez, suelo llamar de usted pero enseguida suelo a pasar a tutear; siempre y cuando esa persona me lleguaaaaa.
Para mi el tutear, es dar más confianza, más acercamiento, más cariño.
Con Antonia, la tarde que nos vimos, después de darnos un grandioso abrazo, pase a preguntarle ¿te puedo hablar de tu? y a partir de ahí parecía que nos hubiesemos conocido de toda la vida.
Encuanto a Felipe Pardo, pués éramos familia.
Fué un duro golpe para todos (era muy joven) y si era tu amigo, ya sabrías que persona era: Luchador, amigo de sus amigos daba gusto de estar con él. Su madre, aunque muy mayor aún vive.
Toda su familia, vive en Barbera del Vallés.
¿Conocías también (al maño)? porque si es así, tienes que conocer a mi hermano. Estaban muy unidos al sindicalismo de la UGT y muy amigos de Felipe.
Saludos y un abrazo.
Mª. Angeles
Por norma, siempre que me dirijo a alguien por primera vez, suelo llamar de usted pero enseguida suelo a pasar a tutear; siempre y cuando esa persona me lleguaaaaa.
Para mi el tutear, es dar más confianza, más acercamiento, más cariño.
Con Antonia, la tarde que nos vimos, después de darnos un grandioso abrazo, pase a preguntarle ¿te puedo hablar de tu? y a partir de ahí parecía que nos hubiesemos conocido de toda la vida.
Encuanto a Felipe Pardo, pués éramos familia.
Fué un duro golpe para todos (era muy joven) y si era tu amigo, ya sabrías que persona era: Luchador, amigo de sus amigos daba gusto de estar con él. Su madre, aunque muy mayor aún vive.
Toda su familia, vive en Barbera del Vallés.
¿Conocías también (al maño)? porque si es así, tienes que conocer a mi hermano. Estaban muy unidos al sindicalismo de la UGT y muy amigos de Felipe.
Saludos y un abrazo.
Mª. Angeles
Buenas noches Mari Ángeles:
Muy bien Mari Ángeles, a partir de ahora abandonamos para siempre los protocolos y dejamos que impere el trato amable, la confianza... ¿cómo te diría yo?, fraterna, pues fraternas son las relaciones que aquí en el Foro venimos manteniendo los unos con los otros.
En cuanto a la foto tuya con Antonia, darte particularmente las gracias por haberla publicado. Estais ambas guapísimas.
Felipe Pardo era una bellísima persona, un hombre cabal y un excelente sindicalista y compañero. Parece que le estoy viendo en las Asambleas de FEMCA-UGT-Sabadell hablando -era muy participativo- desde la banda derecha de la sala de actos. Cuando Felipe marchó a Madrid como miembro de la Comisión Ejecutiva del Sindicato FEMCA-UGT, yo estaba al frente de la Secretaría de Formación del Sindicato en Sabadell. Ví a Felipe poco antes de su muerte en Madrid, en la sede del Sindicato, Avenida de América 25. Allí teniamos reuniones frecuentes el Comité de Empresa de Uralita con motivo de los Convenios colectivos y demás asuntos. Felipe murió joven, una pena. También murió joven el entonces Secretario General de FEMCA-UGT, el amigo Manolo Garnacho. Curiosamente, a Felipe, viviendo en Barcelona, le di mi último
adiós en Madrid y a Garnacho, que residía en Madrid, lo despedí por última vez en Barcelona. A raíz de la muerte de Felipe, conocí a su mujer y a su hijo en el Sindicato en Sabadell, sólo los vi esa vez. Sabía que vivían cerca, pero no recordaba que era en Barberá del Vallés. ¿Que és de ellos, cómo están? Claro que me acuerdo del Maño, de su fisonomía no mucho porque se me borran las imágenes fácilmente, pero del nombre sí y el apellido Clares también me sonaba, te lo iba a decir en mi anterior mensaje y se me pasó. Mi foto está en el Foro, enseñásela a tu hermano a ver si él se acuerda de mí. A lo mejor me recuerda por la barba, porque si bien con unos poquitos de años menos que ahora, también
la llevaba entonces.
Bien Isabel, ya ves qué pequeñito es el mundo, que casi, casi nos conocemos de toda la vida.
Venga, un abrazo.
Muy bien Mari Ángeles, a partir de ahora abandonamos para siempre los protocolos y dejamos que impere el trato amable, la confianza... ¿cómo te diría yo?, fraterna, pues fraternas son las relaciones que aquí en el Foro venimos manteniendo los unos con los otros.
En cuanto a la foto tuya con Antonia, darte particularmente las gracias por haberla publicado. Estais ambas guapísimas.
Felipe Pardo era una bellísima persona, un hombre cabal y un excelente sindicalista y compañero. Parece que le estoy viendo en las Asambleas de FEMCA-UGT-Sabadell hablando -era muy participativo- desde la banda derecha de la sala de actos. Cuando Felipe marchó a Madrid como miembro de la Comisión Ejecutiva del Sindicato FEMCA-UGT, yo estaba al frente de la Secretaría de Formación del Sindicato en Sabadell. Ví a Felipe poco antes de su muerte en Madrid, en la sede del Sindicato, Avenida de América 25. Allí teniamos reuniones frecuentes el Comité de Empresa de Uralita con motivo de los Convenios colectivos y demás asuntos. Felipe murió joven, una pena. También murió joven el entonces Secretario General de FEMCA-UGT, el amigo Manolo Garnacho. Curiosamente, a Felipe, viviendo en Barcelona, le di mi último
adiós en Madrid y a Garnacho, que residía en Madrid, lo despedí por última vez en Barcelona. A raíz de la muerte de Felipe, conocí a su mujer y a su hijo en el Sindicato en Sabadell, sólo los vi esa vez. Sabía que vivían cerca, pero no recordaba que era en Barberá del Vallés. ¿Que és de ellos, cómo están? Claro que me acuerdo del Maño, de su fisonomía no mucho porque se me borran las imágenes fácilmente, pero del nombre sí y el apellido Clares también me sonaba, te lo iba a decir en mi anterior mensaje y se me pasó. Mi foto está en el Foro, enseñásela a tu hermano a ver si él se acuerda de mí. A lo mejor me recuerda por la barba, porque si bien con unos poquitos de años menos que ahora, también
la llevaba entonces.
Bien Isabel, ya ves qué pequeñito es el mundo, que casi, casi nos conocemos de toda la vida.
Venga, un abrazo.