Primera regla de la vida. Nunca olvides a los que te ayudaron. Ya hemos aprendido a ser fuertes, ahora nos toca aprender a ser felices. No podemos olvidar los errores, pero de cada lección nos llenamos de sabiduría. Para obtener éxito en el mundo, hay que parecer loco y ser sabio. La imaginación y la experiencia van de la mano. Solas no andan.