No está probado que las radiaciones electromagnéticas moderadas causen daño a la salud, pero tampoco está comprobado que sean totalmente inocuas. En base a ese argumento, la Sección Primera de la Audiencia Provincial ha condenado a Iberdrola a indemnizar con 600.000 pesetas a una familia murciana, cuyo domicilio se veía permanentemente invadido por las radiaciones generadas por un transformador de media tensión. Pero, lo que es más importante, el tribunal también obliga a la compañía eléctrica a ... (ver texto completo)