buelo, ¿por qué a veces me siento lobo… y otras, burro?
El anciano sonrió con ternura.
—Porque ambos viven en tu interior, hijo. Y cada uno tiene su momento.
El lobo despierta cuando necesitas defender lo que amas.
Te da instinto, fuerza, coraje y lealtad.
Pero si lo dejas dominarse por la rabia… puede herir incluso a quienes quiere proteger.
El burro, en cambio, parece simple.
Lento, callado, subestimado…
Pero es paciente, resistente, sabio.
Camina sin prisa, pero nunca se rinde.
Carga el peso de los días… y sigue avanzando.
Hoy el mundo admira al lobo: al fuerte, al veloz, al feroz.
Y olvida al burro, que en silencio, construyó caminos, cruzó montañas y sostuvo civilizaciones.
Sin lobos, los bosques perderían su alma.
Sin burros, los pueblos jamás habrían llegado tan lejos.
La verdadera sabiduría está en reconocer a ambos.
Y aún más, en saber cuándo dejar que hable el lobo… y cuándo dejar que guíe el burro.
Moraleja:
No te avergüences si avanzas lento.
No te endioses si avanzas fuerte.
Ser humano es tener equilibrio… y elegir con el corazón quién debe guiarte en cada paso.
El anciano sonrió con ternura.
—Porque ambos viven en tu interior, hijo. Y cada uno tiene su momento.
El lobo despierta cuando necesitas defender lo que amas.
Te da instinto, fuerza, coraje y lealtad.
Pero si lo dejas dominarse por la rabia… puede herir incluso a quienes quiere proteger.
El burro, en cambio, parece simple.
Lento, callado, subestimado…
Pero es paciente, resistente, sabio.
Camina sin prisa, pero nunca se rinde.
Carga el peso de los días… y sigue avanzando.
Hoy el mundo admira al lobo: al fuerte, al veloz, al feroz.
Y olvida al burro, que en silencio, construyó caminos, cruzó montañas y sostuvo civilizaciones.
Sin lobos, los bosques perderían su alma.
Sin burros, los pueblos jamás habrían llegado tan lejos.
La verdadera sabiduría está en reconocer a ambos.
Y aún más, en saber cuándo dejar que hable el lobo… y cuándo dejar que guíe el burro.
Moraleja:
No te avergüences si avanzas lento.
No te endioses si avanzas fuerte.
Ser humano es tener equilibrio… y elegir con el corazón quién debe guiarte en cada paso.