Recuerdo con nostalgia los
veranos de mi infancia, en el
pueblo de mi padre;las
fiestas, los baños en el vallejo, el calor de agosto, el
pan con aceite, que me daban en el
molino...
Dejaron una huella indeleble en mi memoria. Tanto, que si es posible, me gustaria retirarme en este
rincon entrañable de "graná", y conpartir con sus gentes amables y cercanas.
Un fuerte abrazo desde los Pirineos (jaca), para todos los de
colomera. www.lacasadelarco.net.