Veo que continuais con la misma cantinela.
Yo os diría que:
Amar lo propio embellece.
Amar lo propio y lo de los demás embellece todavía más.
Amar lo propio y despreciar lo de los demás, además de no ser sensato, indica carencias existenciales y culturales, incluso hasta sexuales.
No sabe vivir mejor la cultura quien más conocimientos de
arte y
tradición tiene, sino quien humildemente la comparte en un ámbito de entendimiento y respeto.
Un
amigo.