Querida amiga mía de toda la vida.
No te puedes imaginar la ilusión que me hizo encontrarte.
Tú como bien dices hemos estado des siempre juntas, una época que siempre recordaré como la más feliz.
Nuestra preocupación pensar a que jugar.
Ademas de verdad Pepi la mayor preocupacion era que durrara mas la tarde para estar mas rato fuera, de acabar enseguida el
pan con una jicara de chocolate para seguir jugando a la soga o sentarte en un banco de aquellos que habia que eran de cemento a contar cuentos o jugar a veo, veo y lo unico que nos sacaba de ese mundo era cuando oiamos nuestro nombre en alto reclamando nuestra presencia y volando para
casa y alo mejor te decian anda guapa ve en ca'Alberto y que te de dos "raciones" y media de
... (ver texto completo)