Es la última en construirse de las cuatro
fachadas de la seo burgalesa.
En el centro del primer cuerpo se abre el vano de la
puerta. Sobre elevado zócalo, arranca un
arco de medio punto rematado con ancha arquivolta. La arquivolta está decorada, en su interior, con
esculturas de
santos. Sobre ella, siete ramos de
flores. Rodean la puerta dos
columnas clásicas con decoración renacentista y dos
calles exteriores de gran desarrollo en altura. En cada una de ellas, dos
hornacinas superpuestas con sendas
estatuas. A la izquierda,
san Juan Evangelista y san Juan Bautista, patronos del promotor de la obra. A la derecha, Santiago y san Andrés.
Rematan las calles laterales los
escudos heráldicos de los Fonseca y de la
Catedral, mostrando también la participación del cabildo en la promoción de la
portada. El
escudo de la
familia Fonseca presenta cinco estrellas. El segundo, es el jarrón de azucenas de María.
En las enjutas, dos parejas de ángeles muestran, de nuevo, esos mismos escudos.