BARACALDO SIN OLVIDARTE UN MOMENTO
Hay lugares por el mundo
que no buscan sus recuerdos,
y no revisas tu rumbo
en los minutos más cuerdos.
Sin embargo en Baracaldo
parece ser un empeño,
sin querer ser hacendado
ves su paisaje risueño.
Los verdes de sus laderas,
La Ría que marca el tiempo,
inviernos de primaveras
incluso con poco viento.
Cuando se lleva guardado
su nombre en el pensamiento,
es algo tan recordado
que a veces te causa aliento.
Baracaldo de palabras
que se funden sin complejos,
hierros que alumbraron fraguas
que tuvieron sus reflejos.
No te olvido Baracaldo,
tu nombre le llevo dentro,
eres un precioso saldo
que puede tener su centro.
Cuando te sobra el olvido,
si tienes conocimiento,
su nombre camina erguido
dejando atrás el mal viento.
Baracaldo fue destino
de muchos trabajadores,
que supieron ver su signo
queriendo ser soñadores.
Baracaldo tiene ritmo
sin buscar nuevas pasiones,
incluso no ves abismo
en algunas negaciones.
G X Cantalapiedra.
Hay lugares por el mundo
que no buscan sus recuerdos,
y no revisas tu rumbo
en los minutos más cuerdos.
Sin embargo en Baracaldo
parece ser un empeño,
sin querer ser hacendado
ves su paisaje risueño.
Los verdes de sus laderas,
La Ría que marca el tiempo,
inviernos de primaveras
incluso con poco viento.
Cuando se lleva guardado
su nombre en el pensamiento,
es algo tan recordado
que a veces te causa aliento.
Baracaldo de palabras
que se funden sin complejos,
hierros que alumbraron fraguas
que tuvieron sus reflejos.
No te olvido Baracaldo,
tu nombre le llevo dentro,
eres un precioso saldo
que puede tener su centro.
Cuando te sobra el olvido,
si tienes conocimiento,
su nombre camina erguido
dejando atrás el mal viento.
Baracaldo fue destino
de muchos trabajadores,
que supieron ver su signo
queriendo ser soñadores.
Baracaldo tiene ritmo
sin buscar nuevas pasiones,
incluso no ves abismo
en algunas negaciones.
G X Cantalapiedra.