BARAKALDO: LOS OCHO APELLIDOS VASCOS...

LOS OCHO APELLIDOS VASCOS
Los ocho apellidos vascos, se marcharon al olvido, se quitaron los atascos en algún nombre elegido. Nadie puede ser perfecto, me lo dijeron de niño, existe el camino recto y mucho sueño de niño. Cada cual con su apellido, sin preguntar a su padre, vivir el tiempo elegido es cosa de nuestra madre. Cuando florecen rencores, si necesitas medallas, mejor usar las razones que no levantar murallas. Apellidos que se pierden con el tiempo y la distancia, dicen que a veces se venden para lucir arrogancia. No busques más apellidos, ni lances extravagancias, sin pensar ser elegidos entre las palabras rancias. Apellidos que caminan buscando delicias sanas, muchos de ellos determinan que son costumbres cristianas. Mezclando los apellidos nunca saltará la alarma, ni se verán deprimidos los que sueñan tener calma. Los apellidos dichosos se irán buscando esperanza, otros suenan más airosos y podrán bailar sus danza. No valen los apellidos, si sufres las madrugadas, quizá se ven reprimidos entre bellas alboradas. Las tardes tienen bellezas que se ven en la distancia, nadie quiere ver torpezas ni soñar con la ignorancia. Muchos apellidos vascos tiene sus huellas guardadas, y nunca tuvieron chascos ni son letras olvidadas. Por los montes van corriendo, montañeros con bonanza, que quieren seguir viviendo sin tener que hacer balanza. G X Cantalapiedra.