Peregrino con cadenas, años 60, UJUE

El penitente asciende las escaleras del santuario. Sus cadenas representan el sacrificio y la mortificación. En la actualidad el número de romeros encadenados ha disminuido considerablemente. Existe una variedad todavía más dificultosa que es caminar con los pies descalzos, encadenado y con pesada cruz.