Quemado y reconstruido
Con ocasión de la gran ofensiva castellana de 1378, el
castillo fue incendiado por las huestes que mandaba don Pedro Manrique. En los primeros años del siglo XV no se había reedificado todavía. Las cuentas reales de 1405 dicen escuetamente que «fue quemado e perdido al tiempo de la guerra». Años más tarde, en 1445, Juan II hizo merced del alcaidío, junto con las pechas de la villa a don Juan de Beaumont, Gran Prior de la Orden de
San Juan, quien posiblemente hizo reconstruir
... (ver texto completo)