El
retablo mayor de estilo plateresco aragonés destaca por su
colorido y dimensiones y fue construido durante el primer tercio del siglo XVI por Juan Pérez Vizcaíno, según la traza de Gabriel Yoly. Dividido en tres pisos y coronado por la Coronación de la
Virgen, preside la
hornacina de honor la venerada imagen
gótica de Nuestra Señora de Rocamador realizada en plata a finales del siglo XIII. La advocación de Rocamador tiene su origen en el
santuario francés de Rocamadour y gozó de gran devoción a lo largo de la Edad Media.
Información obtenida de la Web del
Ayuntamiento de
Sangüesa.