DIMITE EL ALCALDE DE PITILLAS fue condenado por la audiencia a 8 años y 6 meses de inhabilitación y el caso está pendiente del supremo . Diario de Noticias 11 noviembre 2006
Pamplona. Rafael Esparza, alcalde de Pitillas por la Agrupación Independiente, presentó la dimisión en el pleno municipal celebrado ayer mediante un escrito en el que señala que no va a presentarse a las próximas elecciones y que quiere dejar el cargo en manos de "quienes deben tomar el relevo para que vayan conociendo las exigencias del cargo". Esparza fue condenado por la Audiencia Provincial a ocho años, seis meses y un día de inhabilitación por prevaricación, sentencia que está recurrida y sobre la que tiene que pronunciarse el Tribunal Supremo. Su sustituto en el Ayuntamiento será el teniente de alcalde, Amador Jiménez.
Esparza accedió al Ayuntamiento de Pitillas como concejal en 1983 y desde 1991 ha ostentado el cargo de alcalde. Su labor ha sido muy discutida por la oposición, que a lo largo de los años presentó contra él más de veinte denuncias y querellas. Los aspectos más polémicos de su mandato fueron los referidos al intento de ubicar en la localidad una incineradora de residuos MER y el empadronamiento de 135 residentes ficticios para las elecciones de 2003, por lo que finalmente fue condenado por los tribunales.
La Agrupación Independiente de Pitillas hizo público un comunicado tras conocerse la dimisión en el que señala que Rafael Esparza ha sufrido "una de las mayores persecuciones personales que se recuerdan en la vida política de Navarra" y asegura que "sus decisiones han sido analizadas con lupa y han pasado por todos los tribunales posibles", aunque "sus enemigos no han conseguido demostrar nunca, fuera de algún error administrativo, una actuación incorrecta". En cuanto a la condena que le inhabilita, señala que es "provisional" y se da "precisamente en un caso en el que sus denunciantes y opositores pretendieron manipular las elecciones de 2003", por lo que "aunque no resultase absuelto, el único reproche posible es que trató de defender la democracia en Pitillas".
La Agrupación Independiente señala que su dedicación a Pitillas ha sido "totalmente desinteresada" y asegura que bajo su mandato el pueblo ha conseguido "una prosperidad jamás conocida". La AIP anima a los vecinos a "apoyar la labor de las instituciones municipales".
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Pamplona. Rafael Esparza, alcalde de Pitillas por la Agrupación Independiente, presentó la dimisión en el pleno municipal celebrado ayer mediante un escrito en el que señala que no va a presentarse a las próximas elecciones y que quiere dejar el cargo en manos de "quienes deben tomar el relevo para que vayan conociendo las exigencias del cargo". Esparza fue condenado por la Audiencia Provincial a ocho años, seis meses y un día de inhabilitación por prevaricación, sentencia que está recurrida y sobre la que tiene que pronunciarse el Tribunal Supremo. Su sustituto en el Ayuntamiento será el teniente de alcalde, Amador Jiménez.
Esparza accedió al Ayuntamiento de Pitillas como concejal en 1983 y desde 1991 ha ostentado el cargo de alcalde. Su labor ha sido muy discutida por la oposición, que a lo largo de los años presentó contra él más de veinte denuncias y querellas. Los aspectos más polémicos de su mandato fueron los referidos al intento de ubicar en la localidad una incineradora de residuos MER y el empadronamiento de 135 residentes ficticios para las elecciones de 2003, por lo que finalmente fue condenado por los tribunales.
La Agrupación Independiente de Pitillas hizo público un comunicado tras conocerse la dimisión en el que señala que Rafael Esparza ha sufrido "una de las mayores persecuciones personales que se recuerdan en la vida política de Navarra" y asegura que "sus decisiones han sido analizadas con lupa y han pasado por todos los tribunales posibles", aunque "sus enemigos no han conseguido demostrar nunca, fuera de algún error administrativo, una actuación incorrecta". En cuanto a la condena que le inhabilita, señala que es "provisional" y se da "precisamente en un caso en el que sus denunciantes y opositores pretendieron manipular las elecciones de 2003", por lo que "aunque no resultase absuelto, el único reproche posible es que trató de defender la democracia en Pitillas".
La Agrupación Independiente señala que su dedicación a Pitillas ha sido "totalmente desinteresada" y asegura que bajo su mandato el pueblo ha conseguido "una prosperidad jamás conocida". La AIP anima a los vecinos a "apoyar la labor de las instituciones municipales".
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