Hace años escribi este libro, cuando se daban clases de euskera en verano y casi me vi obligada a hacerlo ya que dos personas del pueblo creyendo que era maestra, insistieron lo suyo. Yo no me encontraba capacitada, ni interesada por este trabajo, pero mi sorpresa fue, que fueron llegando a mi casa, sobres con noticias sueltas sobre el historia y cosas del pueblo. Asi que me armé de valor, fui tres vacaciones al Archivo del Ayuntamiento y a la Iglesia, y alli precisamente encontré el libro de las Constituciones Sinodables de gran valor, libro completamente abandonado y deteriorado (espero que que la actualidad este bien cuidado).
Por fin termine el libro que habla de cantidad de temas, bien documentadas, y en su dia los lleve al pueblo, y hubo vecinos que se hicieron con ellos, y creo que el Ayuntamiento se quedó con tres o cuatro.
Toda esta charleta, es para decir, que hay que guardar nuestro patrimonio histórico y ello se hace, guardando su historia, sus casas antiguas y su maravilloso coro.
Oferto un libro sin ningun gasto.