También el Imperio
Romano dejó su huella en forma de legado en estas tierras, en las que se sabe solían celebrar grandes combates de lucha a cargo de sus famosos gladiadores. Durante la época de los reyes godos, uno de sus reyes, Éxica, fue enviado a
Galicia, y durante el período que permaneció en ella, concedió una serie de privilegios importantes a este
pueblo.