En la
fachada del poderoso
edificio se pueden ver, en estilo barroco, los
escudos de las
familias nobiliarias. Fue construido en el s. XVI por Don Juan Sarmiento Valladares, consejero del rey Felipe II de
España. El estilo arquitectónico es renacentista, aunque sufrió nuevos añadidos en el s. XVII, encargados por Don Gonzalo Sarmiento de Valladares, vizconde de Fefiñanes. Más tarde pasó a propiedad de los marqueses de Figueroa, en manos de cuyos descendientes se sigue manteniendo. El
palacio, en forma de "L", asienta en su brazo más corto una atalaya almenada. En las
esquinas exteriores del edificio destacan los grandes
balcones circulares y la decoración renacentista sobre las
ventanas. En la
esquina este de la
muralla se levanta una
torre independiente denominada Torre del
Homenaje, en cuya fachada se encuentra una curiosa inscripción que recoge los valores de los señores de Fefiñanes y un
arco-
puente de traza barroca en el extremo norte del pazo, que antiguamente estaba acompañado por otros tres, complementan el conjunto arquitectónico.