El arco romano por antonomasia es el arco de medio punto, es decir la mitad de una circunferencia. En general es complicado determinar si una construcción es romana o medieval, porque el arco típico del arte románico es también el de medio punto. De ahí que el término "románico" signifique "construido a la manera de los romanos". Los acueductos se construyeron casi con las mismas técnicas hasta el siglo XIX, en la que el uso industrial del acero permitió nuevas soluciones constructivas.