PEREIRO O SAN PEDRO: Querido Marcelino, tu persona va ligada a los recuerdos...

Querido Marcelino, tu persona va ligada a los recuerdos de mi infancia, ya que, durante muchos años nos llevaste mañana y tarde con gran pericia y maestría al colegio con tus autobuses. Tu único hijo fue compañero de bus y de mi clase durante ocho años. Tu esposa, gran mujer, nunca permitió que mi madre subiese andando desde misa si en vuestro coche había una plaza libre. Tu única nieta nació el mismo año que mi pequeña, por esas casualidades de la vida. Hoy los tres lloran por tu partida, al igual que todos tus familiares y amistades. Los que os queremos, quisiéramos aliviar su pena y no podemos, porque la única forma sería devolverte a tu casa, a sus brazos y a su presencia. Como eso es imposible, sólo nos queda unirnos a su dolor, acompañarles, decirles que lo sentimos, que nos unimos a su pesar, que sabemos lo que están pasando porque hemos pasado por ello y rezar, rezar por el eterno descanso de tu alma y porque los que se quedan puedan encontrar algún bálsamo que les ayude a mitigar su dolor.

Personalmente, creo que el cielo se está llenando con nuestros mejores vecinos. Tengo la esperanza de que Allí Arriba estén organizando una gran Xuntanza y que te hayan acogido con los brazos abiertos, como te mereces. Llévate hasta el cielo mi cariño y el de mi familia, repártelo con los que te precedieron y no te preocupes por los que aquí dejas, que les acompañaremos, aún en la distancia, con todo nuestro corazón.
D. E. P.