Os felicito por la idea de crear este foro; los cerredaos siempre tan avanzados y emprendedores. Y apuntándose a lo último de lo último. Mi felicitación sobre todo para Antonio G. Rodicio, que parece el motor de todo esto, y con el que aunque sea a larga distancia, debo tener algún parentesco, aunque los Rodicios abundan en Cerreda, Vilouxe, Caxide, Parada y toda la zona.
Soy hija de Eladio Rodicio Gómez (que ya murió) hijo mayor de Cesáreo Rodicio y María Gómez, de Cerreda. Fueron nueve hermanos de los que sobreviven cuatro, aunque sólo uno, Tomas, ha vivido siempre en Galicia. Mi familia paterna todavía pasa sus vacaciones de verano allí, en la casa familiar, restaurada y perfectamente conservada. Se encuentra en la plaza, frente a la iglesía, como la mi tío Tomás y su familia, que viven en Orense. Mi padre nos contaba siempre los viajes arriba y abajo con los carros, acarreando los bloques de piedra para construirla, antes de la guerra. Nosotros pasábamos siempre allí, con mis tíos y sus hijas, el "Santiago" y lo recuerdo como los días más divertidos del verano. La misa, la procesión, la comilonas de mediodía, la bica y hasta el licor café que en esos días nos permitían beber. Los vestidos nuevos, y sobre todo el baile, arriba en la carretera bajo los castaños. Lo mejor, la verbena a la que nos dejaban ir aunque fuera después de cenar y sólo la amenizara el Campanero, aquel señor del acordeón que siempre tocaba ¡Ay campanera¡. Los cerredaos, y por supuesto mi familia, tan cariñosos y comprensivos con los niños y con los jóvenes. Y la vuelta a casa, camino abajo, entre risas, canciones y comentarios. Y los chicos tan lanzados a partir pareja y a recibir tan tranquilos las calabazas.
Y después, amontonadas en las habitaciones con primas a las que no veías en todo el año, dos o tres por cama, sin parar de reir y no pegar un ojo en toda la noche. ¡Aquello si que eran fiestas¡
Por eso (aunque sigo pasando por allí todos los veranos) me ha hecho una enorme ilusión, encontraros en internet.
Tengo alguneas fotos antiguas de la familia, alguna incluso durante la guerra. La próxima vez, probaré a meterlas, si es que entran en el contenido de vuestro foro.
Un saludo cariñoso
Ana Rodicio anarodicio@gmail.com.
Soy hija de Eladio Rodicio Gómez (que ya murió) hijo mayor de Cesáreo Rodicio y María Gómez, de Cerreda. Fueron nueve hermanos de los que sobreviven cuatro, aunque sólo uno, Tomas, ha vivido siempre en Galicia. Mi familia paterna todavía pasa sus vacaciones de verano allí, en la casa familiar, restaurada y perfectamente conservada. Se encuentra en la plaza, frente a la iglesía, como la mi tío Tomás y su familia, que viven en Orense. Mi padre nos contaba siempre los viajes arriba y abajo con los carros, acarreando los bloques de piedra para construirla, antes de la guerra. Nosotros pasábamos siempre allí, con mis tíos y sus hijas, el "Santiago" y lo recuerdo como los días más divertidos del verano. La misa, la procesión, la comilonas de mediodía, la bica y hasta el licor café que en esos días nos permitían beber. Los vestidos nuevos, y sobre todo el baile, arriba en la carretera bajo los castaños. Lo mejor, la verbena a la que nos dejaban ir aunque fuera después de cenar y sólo la amenizara el Campanero, aquel señor del acordeón que siempre tocaba ¡Ay campanera¡. Los cerredaos, y por supuesto mi familia, tan cariñosos y comprensivos con los niños y con los jóvenes. Y la vuelta a casa, camino abajo, entre risas, canciones y comentarios. Y los chicos tan lanzados a partir pareja y a recibir tan tranquilos las calabazas.
Y después, amontonadas en las habitaciones con primas a las que no veías en todo el año, dos o tres por cama, sin parar de reir y no pegar un ojo en toda la noche. ¡Aquello si que eran fiestas¡
Por eso (aunque sigo pasando por allí todos los veranos) me ha hecho una enorme ilusión, encontraros en internet.
Tengo alguneas fotos antiguas de la familia, alguna incluso durante la guerra. La próxima vez, probaré a meterlas, si es que entran en el contenido de vuestro foro.
Un saludo cariñoso
Ana Rodicio anarodicio@gmail.com.