Bueno, creo que soy uno de los adelantados a esta fecha. Hoy a las 12 horas he despedido este año en la Puerta del Sol, con actuación incluida en la Sexta Tv.
En una breve entrevista, no muy entendida, "después de las llamadas que he recibido" en el móvil de mi mujer, (porque me niego a abrir el mio), y no lo entiendo, pues solamente dije: (Que el año trece que empieza en martes, sea un año feliz para todos), porque yo nací en trece y martes, según el calendario perpetuo." (13/04/48) y la verdad es que he sido la persona mas feliz del mundo."El que no se consuela es porque no quiere".
Luego, fuimos a rematar el día, en O Potiño III, de la calle Conde Duque, cuyo dueño es de Viana, con unos matrimonios de Almería. Porque para mi, lo mejor siempre ha sido la compañía y la relación con las personas.
Mañana, celebraré el Año Nuevo en Valdemoro, y, después de las doce uvas, nos toca cantar el Cumpleaños Feliz, porque es el cumpleaños de mi hijo pequeño, y él me recuerda que le pedí que cuando fuese mayor me llevase a la Luna, y el pobre se hizo para ello Ingeniero Aereonáutico. (Quiero recordar que en A Gudiña hay 4)
Bueno foreros. Yo también soy guerrero. Primero, la guerra de los torpedos. Luego, la guerra de las fechas de las ferias. Ahora, la guerra de las palizas.
Perdón a todos. Yo no soy de las copas del Cardú, pero sí del Bombay Safir y de la Hendricks acompañando a una buena partida de Mús.
Felíz Año, y un abrazo
En una breve entrevista, no muy entendida, "después de las llamadas que he recibido" en el móvil de mi mujer, (porque me niego a abrir el mio), y no lo entiendo, pues solamente dije: (Que el año trece que empieza en martes, sea un año feliz para todos), porque yo nací en trece y martes, según el calendario perpetuo." (13/04/48) y la verdad es que he sido la persona mas feliz del mundo."El que no se consuela es porque no quiere".
Luego, fuimos a rematar el día, en O Potiño III, de la calle Conde Duque, cuyo dueño es de Viana, con unos matrimonios de Almería. Porque para mi, lo mejor siempre ha sido la compañía y la relación con las personas.
Mañana, celebraré el Año Nuevo en Valdemoro, y, después de las doce uvas, nos toca cantar el Cumpleaños Feliz, porque es el cumpleaños de mi hijo pequeño, y él me recuerda que le pedí que cuando fuese mayor me llevase a la Luna, y el pobre se hizo para ello Ingeniero Aereonáutico. (Quiero recordar que en A Gudiña hay 4)
Bueno foreros. Yo también soy guerrero. Primero, la guerra de los torpedos. Luego, la guerra de las fechas de las ferias. Ahora, la guerra de las palizas.
Perdón a todos. Yo no soy de las copas del Cardú, pero sí del Bombay Safir y de la Hendricks acompañando a una buena partida de Mús.
Felíz Año, y un abrazo
Camarada Camba: Tanto como veo la &ª, sobre todo "El Intermedio", y no tuve la fortuna de ver sus deseos de felicidad para todos en el 2013 desde la Puerta del Sol. ¡Mecachis!
Yo desfilo una vez al trimestre por Madrid, para llevar a cabo determinados asuntos más civiles que militares en la Calle del Nuncio. Entro al parking por la Calle Mayor, pero giro a la derecha antes de llegar a la Puerta del Sol. Suelo comer en el "Juan Candelas", por aquello de las guerrillas y los golpes de mano.
El día 16 de enero será mi próximo desfile. Me encanta tomar el café en una terraza de la Plaza Mayor. Aunque si puede tomarlo conmigo cierto ingeniero químico que, siendo hijo mío, no profesa simpatía a mi carrera militar, tengo que acercarme a la Calle Orense, junto a la Torre Picaso, para tomarlo en el entorno de su trabajo.
Algún día nos veremos, si Dios quiere.
Que la vida siga bien, incluso los días martes y trece.
Yo desfilo una vez al trimestre por Madrid, para llevar a cabo determinados asuntos más civiles que militares en la Calle del Nuncio. Entro al parking por la Calle Mayor, pero giro a la derecha antes de llegar a la Puerta del Sol. Suelo comer en el "Juan Candelas", por aquello de las guerrillas y los golpes de mano.
El día 16 de enero será mi próximo desfile. Me encanta tomar el café en una terraza de la Plaza Mayor. Aunque si puede tomarlo conmigo cierto ingeniero químico que, siendo hijo mío, no profesa simpatía a mi carrera militar, tengo que acercarme a la Calle Orense, junto a la Torre Picaso, para tomarlo en el entorno de su trabajo.
Algún día nos veremos, si Dios quiere.
Que la vida siga bien, incluso los días martes y trece.
