ENHE—ESPAñOLES NIETOS E HIJOS DE EMIGRANTES, es una entidad sin fines de lucro y formada en su mayoría por nietos e hijos de emigrantes españoles nacidos en Argentina. Nuestra lucha es la de conseguir la nacionalidad española para los nietos e hijos mayores de 21 años de emigrantes españoles.
El Señor Presidente en su propuesta de campaña dijo:
“Impulsaremos una nueva reforma que amplíe el acceso a la nacionalidad en términos realistas y viables, destierre obstáculos anacrónicos y requisitos temporales innecesarios para su adquisición y recuperación y corrija la persistencia de agravios para situaciones que son equiparables. Los descendientes de españoles de origen hasta segundo grado tendrán derecho preferente a adquirir la nacionalidad española sin discriminación respecto a los nacidos en España.”
Los integrantes del ENHE, pedimos que esta promesa hecha en campaña electoral, por el hoy Presidente de la Nación española, sea cumplida. Queremos que la nacionalidad española sea otorgada por derecho sanguíneo y en el país de origen de cada nieto (segunda generación nacida en el extranjero) y no por medio de un visado.
La exigencia de residir un año en España, para que se reconozca nuestra nacionalidad española, no solo es inconstitucional y contraria al principio de igualdad ante la ley, sino que además es prácticamente imposible de cumplir, porque no podemos abandonar nuestras casas, trabajos y familias.
De hecho, sabemos perfectamente lo que significa dejar familias del otro lado del océano, porque fuimos testigos desde muy pequeños de cómo nuestros abuelos sufrían por no haber podido regresar y por todos aquellos seres queridos que dejaron atrás y que nunca volvieron a ver.
Por ello, solicitamos que se reconozca nuestro derecho a la identidad familiar, nuestro derecho a los orígenes, reconociéndose la nacionalidad española a los nietos de españoles, por derecho sanguíneo, sin discriminación en razón de la edad o lugar de nacimiento, sin necesidad de un visado y sin discriminacion entre hermanos de una misma familia, evitando situaciones injustas en las cuales se otorga a la nacionalidad a ciertos miembros de la familia y a otros no, a pesar de tener los mismos padres y abuelos.
¿Que diferencia existe entre un español nacido en España y muchos de nosotros que nacimos en Argentina, como consecuencia de la emigración forzada o el exilio de nuestros abuelos? Muchos de nosotros, al igual que los españoles nacidos en España, también tenemos 4 abuelos españoles, padres españoles y hermanos españoles.
No le estamos pidiendo que nos paguen una deuda, solo reclamamos un derecho que corresponde por lazos sanguíneos. Negarle la nacionalidad a los nietos, es negar que existen los abuelos emigrantes y esto no es así, porque ellos existen y existe su descendencia. De hecho reconocer su descendencia sería el mejor resarcimiento que se le puede dar a los abuelos españoles, en pago a los muchos años de lágrimas derramadas por su patria, obligadamente dejada y a la que hoy todavía muchos no han podido volver.
Por eso les pedimos que se hagan eco de esta problemática y se las transmitan al Gobierno de España para que pueda ser resuelva a la brevedad y sin temor alguno, porque la mayoría de los hijos y nietos de emigrantes españoles, no tiene intención de "invadir" España.
Ya es hora de que se resuelva esta problematica que afecta a toda la colectividad Española en el exterior.
El Señor Presidente en su propuesta de campaña dijo:
“Impulsaremos una nueva reforma que amplíe el acceso a la nacionalidad en términos realistas y viables, destierre obstáculos anacrónicos y requisitos temporales innecesarios para su adquisición y recuperación y corrija la persistencia de agravios para situaciones que son equiparables. Los descendientes de españoles de origen hasta segundo grado tendrán derecho preferente a adquirir la nacionalidad española sin discriminación respecto a los nacidos en España.”
Los integrantes del ENHE, pedimos que esta promesa hecha en campaña electoral, por el hoy Presidente de la Nación española, sea cumplida. Queremos que la nacionalidad española sea otorgada por derecho sanguíneo y en el país de origen de cada nieto (segunda generación nacida en el extranjero) y no por medio de un visado.
La exigencia de residir un año en España, para que se reconozca nuestra nacionalidad española, no solo es inconstitucional y contraria al principio de igualdad ante la ley, sino que además es prácticamente imposible de cumplir, porque no podemos abandonar nuestras casas, trabajos y familias.
De hecho, sabemos perfectamente lo que significa dejar familias del otro lado del océano, porque fuimos testigos desde muy pequeños de cómo nuestros abuelos sufrían por no haber podido regresar y por todos aquellos seres queridos que dejaron atrás y que nunca volvieron a ver.
Por ello, solicitamos que se reconozca nuestro derecho a la identidad familiar, nuestro derecho a los orígenes, reconociéndose la nacionalidad española a los nietos de españoles, por derecho sanguíneo, sin discriminación en razón de la edad o lugar de nacimiento, sin necesidad de un visado y sin discriminacion entre hermanos de una misma familia, evitando situaciones injustas en las cuales se otorga a la nacionalidad a ciertos miembros de la familia y a otros no, a pesar de tener los mismos padres y abuelos.
¿Que diferencia existe entre un español nacido en España y muchos de nosotros que nacimos en Argentina, como consecuencia de la emigración forzada o el exilio de nuestros abuelos? Muchos de nosotros, al igual que los españoles nacidos en España, también tenemos 4 abuelos españoles, padres españoles y hermanos españoles.
No le estamos pidiendo que nos paguen una deuda, solo reclamamos un derecho que corresponde por lazos sanguíneos. Negarle la nacionalidad a los nietos, es negar que existen los abuelos emigrantes y esto no es así, porque ellos existen y existe su descendencia. De hecho reconocer su descendencia sería el mejor resarcimiento que se le puede dar a los abuelos españoles, en pago a los muchos años de lágrimas derramadas por su patria, obligadamente dejada y a la que hoy todavía muchos no han podido volver.
Por eso les pedimos que se hagan eco de esta problemática y se las transmitan al Gobierno de España para que pueda ser resuelva a la brevedad y sin temor alguno, porque la mayoría de los hijos y nietos de emigrantes españoles, no tiene intención de "invadir" España.
Ya es hora de que se resuelva esta problematica que afecta a toda la colectividad Española en el exterior.