Es un lugar con un misticismo único en Galicia y repleto de leyendas. Se cuenta que San Andrés, uno de los doce apóstoles, llegó navegando hasta los acantilados de la zona en donde volcó su embarcación, quedando ésta convertida en una gran piedra que ahora tiene el nombre de "La barca de San Andrés". La leyenda dice que nadie le prestó ayuda, pero recibió de Dios la promesa de que tendría un santuario y una romería, a los que, vivos o muertos, acudirían todos los mortales.
(19 de Julio de 2022)