SADA MIRANDO A SU COSTA
Cuando los mares se enfadan
con sus olas más dañinas,
los barcos buscan amarras
sin pensar en sus sardinas.
Las olas van provocando
unas negras esperanzas,
que terminan inclinando
muchas sufridas balanzas.
Como cascaras de nueces ... (ver texto completo)
Cuando los mares se enfadan
con sus olas más dañinas,
los barcos buscan amarras
sin pensar en sus sardinas.
Las olas van provocando
unas negras esperanzas,
que terminan inclinando
muchas sufridas balanzas.
Como cascaras de nueces ... (ver texto completo)