Mina de piedra para reconstruir paredes, TALAVERUELA

Ñirre, Cubero. solo saludos.
Vengo de caminar por otros pueblos que conocéis... ha brotado la belicosidad: mala semilla.
Antonio. me he acordado mucho de ti. Ya sabrá por que. No se si te dije alguna vez leo poco. Esta vez sentado en un paseo a lo largo de la playa, cerca de Ayamonte. me he leído España entera, a la vez que he conversado, con mas mayores que yo: esos que han permanecido mudos... pero que no lo son tanto como parece... Pero es que está acostumbrados a mirar a la espesura, temerosos...
Ñirre y J. M. T.
Vaya pareja, tal para cual. Había que haberos visto en aquellos años y todas las travesuras que hacías. Uno de los juegos favoritos de los chicos ha sido siempre tirar piedras, probar puntería y para ello nada mejor que ese cazo viejo, como dices, ese bote oxidado o por qué no, esa bombilla que quedaba viva de las pocas que entonces había en los pueblos.
No me extraña que las lagartijas os temieran, ¿y las gallinas? no salían corriendo espantadas armando gran revuelo y levantando...