¡Encina, cacho joia, más roto el corazón! Jamás pude imaginarme tal traición. El caso es que últimamente te notaba algo rara. ¡Cómo se te ocurrió! Seguramente, en uno de mis muchos viajes p’al extranjero. ¡Yo siempre te fui fiel! No me merecía esto. Cómo has podido engañarme, así, de esa manera tal vil. Sabes que siempre te quise, te quiero y te querré. Pero… ¿Cómo has podido cambiarme cuan cromo? ¡A mí! Siempre te llevaré en el corazón... ¡Ah, el amor! PC
Mensaje
Me gusta
No