Pues desde ayer el libro duerme en mi casa. Demasiado géneroso ha sido D. Paco Neila con nosotros, lo que se agradece. En todos los libros se aprende cosas nuevas aunque sea el tuyo. Cuántas veces habremos comentado lo que hizo el capitán alcantarino al salio de la iglesia, cuando aún había panteones dentro y adosado el cementerio.. no sabiendo a quien le había cortado con la espada la oreja de de un sensor.... cuando vemos en el libro que fue a Juan Moreno, se nos cayó el alma. Si ese señor fue con sus carrizales llevo el retablo y santos al monasterio de la Luz de Brozas, temiendo que no hubiesen hecho nada bueno los portugueses, cuando estábamos en plena guerra de Secesión, allá por 1644. Pues no se nos ha olvidado. SALUDOS.