RELATOS AL ATARDECER-CCCXXXVI
EL BURRO MUERTO. Una linda muchacha llamada Lolita se fue al campo, y compró un burro a un campesino por 500 pesos. El viejo acordó entregarle el animal, al día siguiente. Pero al día siguiente, el campesino le dijo: Lo siento, Lolita, pero tengo malas noticias: el burro murió.
Bueno, dijo Lola, entonces devuélvame mi dinero. No puedo. Ya me lo gasté. Lola le dijo: Bien, da igual entrégueme el burro.
¿Y para qué? preguntó el anciano, ¿Qué vas a hacer con él? Lo voy a rifar, contestó Lola. ¿Estás loca? cómo vas a rifar un burro muerto. No le voy a decir a nadie que está muerto, por supuesto.
Un mes después de este suceso, el campesino se encontró nuevamente a Lola y le preguntó: ¿Qué pasó con el burro?
Lola respondió: Lo rifé, vendí 500 números a 20 pesos cada uno y gané 9980 pesos. ¿Y nadie se quejó? Preguntó el campesino. Solo el ganador, pero a él le devolví sus 20 pesos y en paz.
Lola creció y se hizo política, fue diputada, luego Senadora y después Ministra, y de la misma forma usó el dinero de todos. Y ese dinero, fue a sus bolsillos. Una mujer que durante su vida no trabajó nunca, ni hizo nada productivo, y ahora es muy rica porque encontró muchos "burros muertos" en su camino, y los fue rifando a gente ingenua.
Dijo George Orwell: Un pueblo que elige corruptos, inservibles, cínicos y traidores, no es víctima, "ES CÓMPLICE".
EL BURRO MUERTO. Una linda muchacha llamada Lolita se fue al campo, y compró un burro a un campesino por 500 pesos. El viejo acordó entregarle el animal, al día siguiente. Pero al día siguiente, el campesino le dijo: Lo siento, Lolita, pero tengo malas noticias: el burro murió.
Bueno, dijo Lola, entonces devuélvame mi dinero. No puedo. Ya me lo gasté. Lola le dijo: Bien, da igual entrégueme el burro.
¿Y para qué? preguntó el anciano, ¿Qué vas a hacer con él? Lo voy a rifar, contestó Lola. ¿Estás loca? cómo vas a rifar un burro muerto. No le voy a decir a nadie que está muerto, por supuesto.
Un mes después de este suceso, el campesino se encontró nuevamente a Lola y le preguntó: ¿Qué pasó con el burro?
Lola respondió: Lo rifé, vendí 500 números a 20 pesos cada uno y gané 9980 pesos. ¿Y nadie se quejó? Preguntó el campesino. Solo el ganador, pero a él le devolví sus 20 pesos y en paz.
Lola creció y se hizo política, fue diputada, luego Senadora y después Ministra, y de la misma forma usó el dinero de todos. Y ese dinero, fue a sus bolsillos. Una mujer que durante su vida no trabajó nunca, ni hizo nada productivo, y ahora es muy rica porque encontró muchos "burros muertos" en su camino, y los fue rifando a gente ingenua.
Dijo George Orwell: Un pueblo que elige corruptos, inservibles, cínicos y traidores, no es víctima, "ES CÓMPLICE".
