Ya nadie se acordará que en este chozo vivia el matrimonio Modesto Guillén y su esposa María allá por 1935- 1936,, que eran los hortelanos en la "majada Chicana"; siendo dueño Diego Velasco Garcia, bisabuelo de "olivares". El señor Modesto ha sido uno de los mejores hortelanos que han pasado por estas tierras. Lo que si le pisaba el pié dejaba de tocar la acordeón... es una leyenda rural; pero que bien amenizaba los bailes y las veladas de la cofradías. Por ahora... por el Día de los Santos, los monaguillos íbamos a cenar el tradicional arroz con liebre, que casi siempre la daba la Casa Grande o Parral. ¡Hombre.... cómo nos vamos a olvidar de nuestra querida abuela Magdalena! A su casa iban a lo mismo, gente que ahora tienen alrededor de 70-75 años. SALUDOS.
