STA. BEATRIZ DE SILVA
Junto a sus otros 10 hermanos, recibió de sus padres una esmerada educación y aprendió el amor a Jesucristo y a su Madre.
Cuando la reina Isabel de Portugal se casa con Juan I de Castilla, acompaña a ésta a Tordesillas (Valladolid).
Parece que su belleza fascinó al rey y a cuantos jóvenes la conocieron, y se cuenta que la reina mandó encerrarla en un baúl, del que milagrosamente fue salvada por la Virgen al tercer día de encierro.
Llega al convento de Sto. Domingo el Real, en Toledo, donde moró 30 años en calidad deseglar, dedicada al silencio y a la oración.
Se cuenta que jamás nadie vio su rostro, por mantenerlo cubierto siempre por un velo, muy posiblemente por haber sido su belleza el motivo de locuras ajenas.
Dedicó todos sus bienes al culto a Dios y obras de caridad.
Junto con 12 compañeras funda la Orden de la Inmaculada Concepción, que poco tiempo de vida pudo dirigir, al morir en la misma fecha en que tenía prevista la toma de velos.
Su obra se extendió por Europa y América, contando la Orden más de 150 monasterios al ser canonizada por Pablo VI el 3 de Octubre de 1976.
Junto a sus otros 10 hermanos, recibió de sus padres una esmerada educación y aprendió el amor a Jesucristo y a su Madre.
Cuando la reina Isabel de Portugal se casa con Juan I de Castilla, acompaña a ésta a Tordesillas (Valladolid).
Parece que su belleza fascinó al rey y a cuantos jóvenes la conocieron, y se cuenta que la reina mandó encerrarla en un baúl, del que milagrosamente fue salvada por la Virgen al tercer día de encierro.
Llega al convento de Sto. Domingo el Real, en Toledo, donde moró 30 años en calidad deseglar, dedicada al silencio y a la oración.
Se cuenta que jamás nadie vio su rostro, por mantenerlo cubierto siempre por un velo, muy posiblemente por haber sido su belleza el motivo de locuras ajenas.
Dedicó todos sus bienes al culto a Dios y obras de caridad.
Junto con 12 compañeras funda la Orden de la Inmaculada Concepción, que poco tiempo de vida pudo dirigir, al morir en la misma fecha en que tenía prevista la toma de velos.
Su obra se extendió por Europa y América, contando la Orden más de 150 monasterios al ser canonizada por Pablo VI el 3 de Octubre de 1976.