He tenido la oportunidad esta tarde de poder acompañar a la familia de Filo, al igual que otra mucha gente de Membrio lo ha hecho y lo hará; no hay palabras, están destrozados. Muchas personas no conocíamos su estado por lo que la noticia ha sido más fuerte aún. A Filo como a tantas otras personas que nos han dejado les quedaba mucho por disfrutar de la vida y de los suyos. Los que aquí quedamos deberíamos de aprender a valorar el día a día y olvidarnos de "los malos rollos" que a veces nos enzarzan en un sinsentido. Ante la enfermedad y ante la muerte casi nada tiene importancia.
La vida continúa y deseamos a Agustín y a las hijas que miren hacia delante con la ayuda de este fuerte abrazo que desde aquí le enviamos.
Hasta siempre Filo y un abrazo para que te llegue allí donde estés.
La vida continúa y deseamos a Agustín y a las hijas que miren hacia delante con la ayuda de este fuerte abrazo que desde aquí le enviamos.
Hasta siempre Filo y un abrazo para que te llegue allí donde estés.
