3 meses GRATIS

MEMBRIO: Me alegro que Fidencio se haya decicido ¡por fin! a...

Amigo Vísperas. Creo, efectivamente, que el amigo Fidencio, nos dijo aquello del exceso de cordura. Creo que fue el colofón de la tarde/noche tan agradable que pasamos. En realidad, para mí, esas son las fiestas- estar, departir, con los amigos- las casetas y esas cosas…debe de ser que he visto demasiadas. Voy a seguir poniendo, como le prometí, cosas de Fidencio (también por sugerencia de Coguta) Pero, desearía que alguien en el pueblo le dijera, cuando lo vea, que efectivamente se están publicando, porque él, el hombre, me parece que no tiene acceso a este foro. Un abrazo, amigo, y, gracias por el apoyo que nos brindas en momentos tan difíciles- la cosa futbolera, ya sabes- Lo dicho. PA

<<PROPUESTA
…A este mundo de prisas e impaciencias,
Donde un segundo empuja a otro segundo
Y la experiencia no es madre de la ciencia
E importa más lo aparente a lo profundo

Le falta amor y sobra hipocresía,
Ni disfrutamos de nuestras propias soledades,
Pues enterremos las absurdas vanidades
Y demos vida al cariño y la alegría.

Membrío, 20 de mayo de 1998

Fdo. Fidencio Vital Gil >>

Me alegro que Fidencio se haya decicido ¡por fin! a "exponer sus cosas" en éste nuestro "andén". Y además que seas tú el que lo transcriba... Se une el aprecio que siento por los dos.
Cuando lo vea se lo diré, pero no sé cuando será... es que este pueblo tiene distancias infinitas, a veces.... Las que van de un fin de semana a otro. (Entre semanas no veo la calle, porque suele estar vacía. Aunque es verdad, que en cuanto asoma el sol, la cosa cambia)
Un beso PC. Esto de preocuparte en "transcribir" los escritos de Fidencio, da una ligera idea de cómo eres.
"Donde un segundo empuja a otro segundo" (Me gusta esta frase)
Respuestas ya existentes para el anterior mensaje:
“La distancia infinita”, amiga ADL, es una excelente metáfora para decirnos que la calle la ves…vacía. Y, por supuesto, todo lo que has dicho en cuatro renglones rectos con lápiz torcido. Es un placer leerte.
Lo mío, respecto a Fidencio, no tiene mérito alguno; básicamente porque no soy masoquista y disfruto haciéndolo. “Donde un minuto empuja a otro minuto”…las prisas. Son esas cosas que te llegan. Precisamente, charlando con tu hermano y con él, el viernes por la noche- ajenos un tanto a ruidos ... (ver texto completo)