Querido amigo Caracol, desde mi más profundo cariño y sin ánimo de ofenderte ni contradecirte, voy a intentar exponer lo que pienso, ya que como sabes yo también me identifico como cátolica y del grupo de la Renovación Carismática.
La Iglesia, la formamos todos, que somos humanos, por lo que está llena de errores y contradiciones.
A mí también me rechina el boato de algunos actos y máxime si tenemos como referecia como vivió Jesús.
Pero este mismo Jesús no juzgaba a nadie, Él dijo: " No juzgueis y no sereis juzgados". "Quien esté libre de pecado, que tire la primera piedra".
Juan Pablo II, perdonó a quien quiso matarle, no podía pagar para sacarlo de la cárcel, porque la justicia humana lo había condenado. Su perdón era de otro tipo, el más importante. Estoy segura que rezó mucho por el.
Todos los que nos consideramos cristianos, somos representantes de Jesús.
Pero sobre todo lo que quiero transmitirte es que lo que debemos hacer, cuando veamos que alguien no sigue los senderos rectos, que de todas formas habría que ver si van o no por esos senderos, ya que el corazón del hombre sólo lo conoce Dios; es pedir para que los corazones de todos se abran a la acción del Espiritu Santo, para que seamos capaces de vivir y transmitir lo que Jesús nos quedó dicho cuando se despidió: "Amaos los unos a los otros como yo os he amado".
Si Él nos perdona nuestras faltas, quienes somos nosotros para no perdonar las faltas de los demás?
Y por último: Cuando un joven le preguntó a Jesús:_Maestro que debo hacer para conseguir el cielo, Él le dijo: Vende todo cuanto tienes, dáselo a los pobres y sigueme.
Cuantos hacemos eso? Pues............. Intentaremos hacerlo lo mejor que podamos y sepamos.
un abrazo.
La Iglesia, la formamos todos, que somos humanos, por lo que está llena de errores y contradiciones.
A mí también me rechina el boato de algunos actos y máxime si tenemos como referecia como vivió Jesús.
Pero este mismo Jesús no juzgaba a nadie, Él dijo: " No juzgueis y no sereis juzgados". "Quien esté libre de pecado, que tire la primera piedra".
Juan Pablo II, perdonó a quien quiso matarle, no podía pagar para sacarlo de la cárcel, porque la justicia humana lo había condenado. Su perdón era de otro tipo, el más importante. Estoy segura que rezó mucho por el.
Todos los que nos consideramos cristianos, somos representantes de Jesús.
Pero sobre todo lo que quiero transmitirte es que lo que debemos hacer, cuando veamos que alguien no sigue los senderos rectos, que de todas formas habría que ver si van o no por esos senderos, ya que el corazón del hombre sólo lo conoce Dios; es pedir para que los corazones de todos se abran a la acción del Espiritu Santo, para que seamos capaces de vivir y transmitir lo que Jesús nos quedó dicho cuando se despidió: "Amaos los unos a los otros como yo os he amado".
Si Él nos perdona nuestras faltas, quienes somos nosotros para no perdonar las faltas de los demás?
Y por último: Cuando un joven le preguntó a Jesús:_Maestro que debo hacer para conseguir el cielo, Él le dijo: Vende todo cuanto tienes, dáselo a los pobres y sigueme.
Cuantos hacemos eso? Pues............. Intentaremos hacerlo lo mejor que podamos y sepamos.
un abrazo.