CAPÍTULO SEGUNDO (Una aproximación a la historia de Alcorcón)
Como quiera que no voy a romperme el coco indagando el porqué a este pueblo (ahora ciudad, antigua pedanía) ¡Que no se me mosqueé nadie! lo colocaron donde está y lo llamaron así, haré lo que buenamente puede, desde el punto de vista argumental, para llegar a donde quiero; es decir, a la cena.
A los de Alcorcón, se le llama alcorconeros. El posible, por tanto, que el nombre provenga de que, en el lugar donde hoy se ubica la ciudad, en tiempos remotos- pongamos de los almohades- habría unos alcornoques junto a unos cocoteros. De ahí debe de venir la cosa. Comprenderán, que no me voy a liar con la toponimia del lugar, para llegar a la conclusión de que, efectivamente, los moros (lo de árabe, es otra cosa) pusieron allí un Quiosco, p’a que los que iban a Extremadura se tomaran algo. Pero, el desarrollo argumental me está fallando- me he dado cuenta a tiempo- porque no sé que pintaban los cocoteros ahí en tiempos de los tíos de África, si Colón no había nacido. Es posible que los Omeyas trajeran los cocos del Eufrates. ¡No! Volvamos a empezar:
Alcorcón, así de pronto, no era nada. Y, en un enorme alcornoque que había al lado de la Nacional V, se puso un tío con un botijo de agua. Miró el enorme alcornoque y se dijo: “ ¡Vaya alcornocón! “; y de ahí proviene la palabra Alcorcón. Posteriormente, en uno de los viajes de Hernán Cortés a la corte, parose a tomar agua y diole pena el hombre del botijo. Para que tuviese más sombra, le plantó un cocotero de los que traía de América. De ahí, que Alcorcón se llamase Alcorcón y a los de Alcorcón, alcorconeros (un tío de Alcorcón, bajo un cocotero)
Dicen que ahora, los toponímicos (los que tienen un topo-anímico) andan, con lo de la evolución lingüística, intentando cambiarle el nombre. Creo que quieren ponerle ALCORCONAZO (palabra compuesta entre alcornoque y balonazo) Pasarán miles de años y, en realidad, nadie se acordará. Se dirán muchas tonterías, y algún que otro historiador/a, hará su tesis doctoral sobre el tema, llegando seguramente a la fáctica conclusión, de que el nombre proviene de un encuentro alrededor de un alcornoque, con una pelota de trapo, entre patricios y plebeyos romanos, en tiempos de Quinto Sertorio. Al final, dirán, que vino Viriato (una especie de árbitro) se cabreó, y le pegó un hachazo al alcornoque (Alcorconchazo= Alcorconazo) Continuará…. Abrazos. PC
Como quiera que no voy a romperme el coco indagando el porqué a este pueblo (ahora ciudad, antigua pedanía) ¡Que no se me mosqueé nadie! lo colocaron donde está y lo llamaron así, haré lo que buenamente puede, desde el punto de vista argumental, para llegar a donde quiero; es decir, a la cena.
A los de Alcorcón, se le llama alcorconeros. El posible, por tanto, que el nombre provenga de que, en el lugar donde hoy se ubica la ciudad, en tiempos remotos- pongamos de los almohades- habría unos alcornoques junto a unos cocoteros. De ahí debe de venir la cosa. Comprenderán, que no me voy a liar con la toponimia del lugar, para llegar a la conclusión de que, efectivamente, los moros (lo de árabe, es otra cosa) pusieron allí un Quiosco, p’a que los que iban a Extremadura se tomaran algo. Pero, el desarrollo argumental me está fallando- me he dado cuenta a tiempo- porque no sé que pintaban los cocoteros ahí en tiempos de los tíos de África, si Colón no había nacido. Es posible que los Omeyas trajeran los cocos del Eufrates. ¡No! Volvamos a empezar:
Alcorcón, así de pronto, no era nada. Y, en un enorme alcornoque que había al lado de la Nacional V, se puso un tío con un botijo de agua. Miró el enorme alcornoque y se dijo: “ ¡Vaya alcornocón! “; y de ahí proviene la palabra Alcorcón. Posteriormente, en uno de los viajes de Hernán Cortés a la corte, parose a tomar agua y diole pena el hombre del botijo. Para que tuviese más sombra, le plantó un cocotero de los que traía de América. De ahí, que Alcorcón se llamase Alcorcón y a los de Alcorcón, alcorconeros (un tío de Alcorcón, bajo un cocotero)
Dicen que ahora, los toponímicos (los que tienen un topo-anímico) andan, con lo de la evolución lingüística, intentando cambiarle el nombre. Creo que quieren ponerle ALCORCONAZO (palabra compuesta entre alcornoque y balonazo) Pasarán miles de años y, en realidad, nadie se acordará. Se dirán muchas tonterías, y algún que otro historiador/a, hará su tesis doctoral sobre el tema, llegando seguramente a la fáctica conclusión, de que el nombre proviene de un encuentro alrededor de un alcornoque, con una pelota de trapo, entre patricios y plebeyos romanos, en tiempos de Quinto Sertorio. Al final, dirán, que vino Viriato (una especie de árbitro) se cabreó, y le pegó un hachazo al alcornoque (Alcorconchazo= Alcorconazo) Continuará…. Abrazos. PC