Mi prima Ana, que guapa con el traje regional; siempre diferente, como su boda, y esto, la engrandece. Jesús, de Piornal, duro como el piorno, con el sombrero serrano; buen tío. A ellos, que eran los protagonistas, como hace tanto tiempo que no los veo (si nos ojean), les mando un beso. Las fotografías te hacen recordar, en forma de instantánea, que los seres queridos, aunque se fueron, aparecen y desaparecen como una luz destellante; mi tío Enrique, es uno de ellos.
Es cierto, es diferente y única. Es especial, que grande es.
Ana, que te llegue nuestro cariño.
Ana, que te llegue nuestro cariño.
