Hubo una vez que por incompatibilidades, altanería o vaya usted a saber de los dueños de las dehesas contiguas, se llegó a comer TRES VECES en la "mañana del romero" Damos de, que en una de ella uno de los mejores jamones que hemos comido en nuestra vida, regado con el vino de"marqués de Cáceres" Son anécdotas que serán muy difícil que vuelvan a pasar... ni que formen parten del saber popular. Cómo recordar al cura párroco D. Agustín Frenedoso, gracias impulsor del "Monumento". SALUDOS.