Pues nada... eso está hecho "MFCR". No comprenderemos, que lo que sucede hoy... es la respuesta del ayer. Pero como dice "PISAERA", el pasado es inamovible, ¿QUE HAY QUE APRENDER...?, pues sí. Pero no es menos verdad: que cada acto o cuestión hay que analizarlo con "ojos" de tiempo o en el momento que sucedieron. Nosotros si lo estudiamos, ojeamos, interesamos es porque en ellos encontramos muchas curiosidades, que después nos motivan hacer: ·UN PASEO POR EL CAMPO". Veamos un par de ellas sólamente:
7º.-...
Lo malo es que en verano la cueva de "La Calabaza", habría poca o ninguna agua y pierde de por si el encanto. Pero visitarla... hay que visitarla. Estuvismos el verano pasado a punto de hacerlo; pero se oyó una voz que nos preguntó:
- ¿Y donde está éso?
-Ves aquella hondonada más "azulada" y oscura, allá en lo lejos.
-Sí
-Aquello es el río Salor.
- ¡Muchacho... dónde vas con las horas que son!... Por ahí se nos hace de noche y encima tenemos que saltar alabradas.
-Tienes razón... ¡Vámonos!
SALUDOS.
Bueno, bueno... como NADA. Cuando se le preguntó (ya verás "VIRGO" lo que contestaron) algo más, la repuestas fueron las siguientes:
P/. ¿Si el pueblo no tiene fincas de aprovechamiento común, las ha tenido?
R/. Si. las ha tenido.
P/. Cuales fue?
R/. Laos llamados Baldios, y según la tradición Claveria de D. Antonio Garay.
P/. ¿Desea volver a tenerlas?.
...
Hay que hacer una visita a esta tierra cuyo nombre nunca olvidaremos pero haciendo un recorrido detenidamente hasta llegar a La Calabaza, lo malo es que el camino sería muy ancho y aunque la salida fuera de madrugá la hora de regreso sería una incógnita, en estos lares no vale caminar por camino estrecho. Saludos.
Ese tercio para el Señorito no era justo y si el Señorito hubiera sido bueno no debiera haber aceptado ese pago y con reconocer que sin costarle un duro la finca se la dejaban limpia y brillante como una taza de plata y con eso ya estaba bien pagado el arrendamiento.
7º.-...
Lo malo es que en verano la cueva de "La Calabaza", habría poca o ninguna agua y pierde de por si el encanto. Pero visitarla... hay que visitarla. Estuvismos el verano pasado a punto de hacerlo; pero se oyó una voz que nos preguntó:
- ¿Y donde está éso?
-Ves aquella hondonada más "azulada" y oscura, allá en lo lejos.
-Sí
-Aquello es el río Salor.
- ¡Muchacho... dónde vas con las horas que son!... Por ahí se nos hace de noche y encima tenemos que saltar alabradas.
-Tienes razón... ¡Vámonos!
SALUDOS.
Bueno, bueno... como NADA. Cuando se le preguntó (ya verás "VIRGO" lo que contestaron) algo más, la repuestas fueron las siguientes:
P/. ¿Si el pueblo no tiene fincas de aprovechamiento común, las ha tenido?
R/. Si. las ha tenido.
P/. Cuales fue?
R/. Laos llamados Baldios, y según la tradición Claveria de D. Antonio Garay.
P/. ¿Desea volver a tenerlas?.
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Hay que hacer una visita a esta tierra cuyo nombre nunca olvidaremos pero haciendo un recorrido detenidamente hasta llegar a La Calabaza, lo malo es que el camino sería muy ancho y aunque la salida fuera de madrugá la hora de regreso sería una incógnita, en estos lares no vale caminar por camino estrecho. Saludos.
Ese tercio para el Señorito no era justo y si el Señorito hubiera sido bueno no debiera haber aceptado ese pago y con reconocer que sin costarle un duro la finca se la dejaban limpia y brillante como una taza de plata y con eso ya estaba bien pagado el arrendamiento.