Todo eso como hemos dicho muchas veces ha ido el rio abajo y el pensar que la gente volverá al pueblo ni pensarlo. Muchas veces ya ni en la fiesta (antes no faltaba nadie por lejos que estuviera), ni puentes ni nada, simplemente porque ya no estan los que tenian que estar. Por otro lado la economía de subsistencia no da para más y lo único que nos queda es que la gente que no tiene pueblo, a través de las agencias y algunos programas vengan a los pueblos a resucitar o en parte a ayudar a resucitar lo que fué el pueblo en tiempos, pero dificil, dificil o incluso la administración recuperase la cabra para limpieza del terreno pero como ya he dicho muchas veces las casas cerradas, siguen cerradas y si por mucho que nos empeñemos los que vuelvan a abrirlas no seran los mismos que nos dejaron para siempre, seran otros ajenos y extraños, asi que pedirle al de la barba negra con el niño en la mano que nos guarde muchos años a los ultimos herederos del valle del ladrillar.